Es complejo determinar el origen de la piratería. Algunos afirman que la actividad comenzó en el siglo V a.C. en el golfo Pérsico. Más tarde los piratas sarracenos serían los más famosos de la Edad Media, aunque a menudo se ha denominado a los propios vikingos como piratas y saqueadores del Mar del Norte. Pero la Edad de Oro de la piratería, como bien se ha conocido popularmente, se sitúa entre los siglos XVII y XVIII. En el imaginario social, se sitúa geográficamente esta piratería en América, aunque Asia fue otro de los grandes nidos de bandidos navales. La actividad ha resistido el paso del tiempo y, en la actualidad, se mantiene en algunos puntos del globo. Es cierto que no de la misma forma, sino que las armas y las estrategias han evolucionado con los cambios tecnológicos y sociales.
Las diferentes épocas conllevan diferentes tipos de piratería, pero en todas ellas hay un punto común. En toda la historia los más audaces y viles piratas de los que se ha hablado han sido hombres. Los saqueos de los piratas ingleses Hawkins y Drake a la Corona Española han pasado a la posteridad. También el capitán Roberts, Pierre Le Grand, Lewis… Pero algunos de los más sanguinarios y más intrépidos no fueron varones, sino mujeres. Estas son algunas de las piratas más destacadas de la historia.
Jeanne De Clisson
Jeanne vivió en los primeros años del siglo XIV. Era hija de una familia noble y su nombre de soltera era Jeanne de Beauville. Se casó con un conde bretón, Olivier de Clisson. Su marido intervino en la Guerra de Sucesión Bretona en favor de Francia a pesar de que ella intentó evitarlo. Cuando los ingleses lo apresaron, pero después de un tiempo lo liberaron. Por ello el rey de Francia le acusó de traidor y lo ejecutó.
Jeanne juró vengar a su marido y se hizo con tres barcos que pintó de negro y colocó velas rojas. La Flota Negra de Jeanne de Clisson fue protegida por Inglaterra, que se encontraba en la Guerra de los Cien Años contra Francia. Por eso, la Flota Negra que ella lideró, se convirtió en el terror de los franceses y dio varias conquistas en la costa francesa a Gran Bretaña.
Sayyida Al-Hurra
Su nombre significa "Dama soberana". Toda la información sobre esta mujer se ha extraído de registros cristianos del Reino de Castilla y el Reino de Portugal. Sayyida vivió entre finales del siglo XV y principios del XVI. Nació en el reino nazarí de Granada antes de que fuera conquistado por los Reyes Católicos, por lo que después de esto tuvo que huir de lo que quedaba de al-Ándalus. Se casó con el gobernador de Tetuán, pero se dice que nunca olvidó esta conquista de Granada y por eso se convirtió en pirata.
Nunca pudo reconquistar el reino nazarí, pero sí que consiguió hacerse temer por los reinos cristianos de la Península Ibérica. Sayyida formó una alianza con Oruç Reis, más conocido como Barbarroja en Occidente y asaltó buques mercantes castellanos y portugueses por el Atlántico.
Grace O'Malley
Grace vivió en el siglo XVI en Irlanda. Fue hija de un noble comerciante irlandés. Por eso mismo, desde pequeña, Grace comenzó a iniciarse en el mundo de la navegación además de recibir una alta educación como noble. En 1546 se casó con Donald an-Chogaidh O’Flaherty. Junto a él se dedicó al comercio y la piratería incluso tomando castillos violentamente.
Al enviudar, Grace continuó con su vida pirata y se volvió a casar. Sería durante el reinado de Isabel I cuando tuviera lugar la Guerra de los Nueve Años de Inglaterra contra Irlanda. Grace se unió a esta guerra, pero se entrevistó con la mismísima reina de Inglaterra con la que llegó a un acuerdo personal, pero la guerra entre ambos territorios continuó.
Anne Bonny y Mary Read
Anne Bonny vivió en el siglo XVIII y se casó con John Bonny, con quien viajó a la isla de New Providence, actuales Bahamas. Su marido comenzó a actuar de informante para el gobernador de New Providence, cosa que no gustó a Anne.
En las tabernas de lo que actualmente es Nassau, Anne Bonny comenzó a mezclarse con piratas y se enamoró de Jack Rackham. Bonny no quiso divorciarse de John, así que simplemente decidió escaparse con Rackham viajando a bordo del "Ranger", el barco de Charles Vane, uno de los piratas más conocidos en las Bahamas. En sus periplos con Jack Rackham, Anne Bonny conoció a Mary Read, que se unió a su tripulación pirata. Mary Read vestía como un hombre y parece ser que las mujeres mantuvieron una relación amorosa. Ambas fueron condenadas en 1720.
Ching Shih
Ching Shih nació en China en el siglo XVIII. Desde los dieciséis años trabajó como prostituta en Cantón hasta que se casó con un capitán pirata llamado Cheng. La pareja fue una de las más temidas en los mares de China y los países colindantes. Su flota participó en la rebelión vietnamita de Tay-son.
Cheng murió a comienzos del siglo XIX y la ahora viuda Ching lideró a los 70.000 marineros de su tropa. A menudo se ha considerado a Ching Shih como una de las piratas más exitosas de la historia de la piratería. Su final, sin embargo, no es legendario, sino que pidió el perdón al gobierno chino después de sus actos de pillaje masivos y ante un ataque del propio gobierno, y murió como regenta de un prostíbulo y una casa de apuestas en Cantón.
FUENTES:
Defoe, D., Historia general de los robos e asesinatos de los más famosos pirata, Madrid, Valdemar, 2006.
Eastman, T. y Constance B.. The Pirate Trial of Anne Bonny and Mary Read, Cambria, Fern Canyon Press, 2000.
Lapierre, A., Grandes Aventureras 1850-1950, Barcelona, Blume, 2007.
Robinson, J., Wayward Women, Oxford, Oxford Press, 1990.
Snow, E. R., Women of the sea, New York, Dood, Mead and Co. Souza, 2000.
Stanley,J., Bold in Her Breeches, Women Pirates across the Ages, London, Pandora Press, 1996.