Todavía recuerdo aquel 11 de septiembre de 2013. Sí 11-S, un día que quedó marcado años antes para toda la humanidad por uno de los sucesos más tristes y trágicos de la Historia. Pero no todo los 11-S iban a ser tristes y para mi aquel fue determinante.
Envié un mensaje directo a través de la red social Twitter a la cuenta de Real Jaén VAVEL para poder contar la actualidad del club blanco, el equipo de mi tierra. Me aceptaron y no fue hasta noviembre de ese mismo año cuando me adentré de lleno a escribir debido a que mis estudios de 2º en Ingeniería de Diseño Industrial en Málaga no me dejaban demasiado tiempo. Mi inicio fue cuanto menos vertiginoso, comencé de entrada siendo el coordinador de una sección que había quedado desierta y en poco más de dos meses pasamos de 0 artículos a una media de 45 al mes.
Aumentamos la confianza de los aficionados blancos en nuestras informaciones siempre veraces y contrastadas como acostumbra nuestra línea editorial, miles de personas seguían nuestros directos, crónicas, entrevistas y reportajes a la vez que el equipo lagarto disputaba sus partidos en el regreso a la categoría de plata del fútbol español.
Posteriormente, Mario Magro se puso en contacto conmigo para ofrecerme el puesto de Coordinador de Segunda División. Lejos de sentir el vértigo que puede producir dirigir un equipo humano de decenas de personas cuando solo llevas algunos meses en este mundo,acepté sin pensarlo. Con trabajo y esfuerzo se consiguió levantar una redacción que en los últimos meses carecía de cierto compromiso. Ayudado por la gran labor de todos los coordinadores y en especial de Gerardo Mayor, mi mano derecha en este camino por la división de plata, conseguimos introducir novedades que han sido compartidas por centenares de aficionados y jugadores de los propios clubs.
Mi afición por el cine además me llevó,con la llegada de abril,a adentrarme en la redacción de Cine VAVEL en la que en apenas 6 meses he redactado un centenar de artículos de esos en los que se disfruta escribiendo, incluso algún reportaje de casi 7000 palabras. Redacción en la que comparto trabajo con compañeros de una gran calidad periodística y humana como Ana María o Fex sin los que todo sería más complicado.
Pero este trabajo no solo sirvió para ayudar al crecimiento de VAVEL sino para ayudar a mi evolución como persona y a darme cuenta de que esta era la senda a través de la que quería caminar toda mi vida. Abandoné mis estudios de ingeniería en el segundo año en busca de llenarme de lo que realmente me hiciese feliz y me dispuse a comenzar el grado en Comunicación Audiovisual. La V me había ayudado a encontrarme a mi mismo y a saber para lo que valía y a lo que quería dedicarme en mi futuro.
Ahora, tres meses después de comenzar mis nuevos estudios y un año después de mi inclusión en VAVEL, puedo decir que soy feliz con la labor que desempeño día tras día. Levantarte cada día con la aspiración de afrontar nuevos retos que te llenan es el mejor método para madurar y realizarte como persona.
Se marcha un 2014 de cambios, pero positivos, muy positivos me atrevería a decir. El hecho de poder haber ido acreditado junto a mi compañero y hasta ya amigo Juanjo a cubrir los partidos del equipo de mi tierra junto a grandes de este mundo del periodismo en La Victoria o en estadios donde se vive el fútbol de bronce desde el alma como Marbella o El Palo, el hecho de haber podido entrevistar a directores de renombre como Alberto Rodriguez, a actores de moda como Jesús Castro antes que ningún medio o a grupos de música revelación como IZAL.Incluso que algunos de los mayores nombres propios del cine nacional compartan,lean y te feliciten por tus artículos son acontecimientos que quedarán para el recuerdo de este año que ya se marcha con una sombra detrás más que brillante.
Porque como dijo J.Brown "Nunca olvides que basta una persona o una idea para cambiar tu vida para siempre, ya sea para bien o para mal". Y a mí, Javier Robles y su idea de convertir VAVEL en el sueño de todos y cada de los que lo formamos, me cambió la vida aquel 11 de septiembre. Y para bien.