Los tres mercados principales de capitales han sufrido un ligero retroceso durante la presente semana. La bolsa sufre la caída más grave mientras que el Tesoro Público por primera vez durante el año no consigue colocar todo el volumen, previsto en 3.500 millones, de los que se han colocado 3.200.
Sobre Las dudas sobre Europa y Estados Unidos repercuten en los mercados de forma negativatodo la demanda del bono a 15 años cayó de 2,5 veces la oferta a 1,3, mientras que aumentó ligeramente la del bono a diez años, que ha llegado a situarse en el 2,33 %, mientras las últimas semanas se estabilizaba en el 2 o 2,10 %. La prima de riesgo, que es la diferencia que paga el gobierno español para financiarse con respecto a lo que paga el alemán, ha llegado a estar en los 161,2 puntos (las últimas semanas estaba entre los 110-120).
El interés marginal (el más alto por el que el Estado ha pagado para financiarse) del bono a diez años ha estado situado casi en el 2,227 %, superando el 2,09 % de la anterior subasta. El bono a 15 años en cambio ha bajado del 3,5 % al 2,9 % (la última subasta del bono a 15 años fue en mayo).
El Íbex sigue bajando
Sigue el descenso del selectivo español. Si la semana pasada se situaba ligeramente por encima de los 10.100 puntos, durante esta semana el selectivo está descendiendo hasta los 9.700, a falta de la jornada de mañana. El Íbex roza mínimos anuales con una caída del 6,2 % semanal.
El miedo a la recesión en Europa y el freno del crecimiento en Estados Unidos están haciendo que las bolsas europeas desciendan en un alto porcentaje: la bolsa portuguesa tras la caída del Espírito Santo se deja más de un 4 %, mientras la prima de riesgo griega, tras los problemas para acordar nuevos plazos con la "troika" (la Comisión Europea, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Central Europeo, las entidades que rescataron los países con problemas), ha ascendido a más de 890 puntos, cifras que no se alcanzaban desde finales de 2013.
Entre el 26 y el 30 de octubre el Banco Central Europeo debe publicar los resultados de las auditorías realizadas a los bancos europeos los últimos meses. El resultado de estas pruebas de estrés marcarán los próximos meses de los mercados de capitales.
El libro "beige" de la Reserva Federal, que define la situación económica, habló de "moderado crecimiento" en Estados Unidos y abrió la posibilidad de seguir aumentando la política expansiva de compra de activos.
