El Íbex descendió esta semana un 3,4 % y no pudo superar definitivamente la barrera de los 11.000 puntos que llegó a alcanzar a mediados de semana. El jueves y el viernes se registraron grandes pérdidas, llegando a mínimos desde mayo. La mala situación del banco portugués Espírito Santo, cuya cotización fue suspendida tras caer un 40 %, después que su sociedad matriz entrara en problemas de pago, además de la situación de impago de Argentina y los malos datos del PMI de la zona euro han empujado a los números rojos a las bolsas europeas, siendo el Íbex la que más ha bajado.
Durante el mes de agosto se espera una bajada del volumen del movimiento de las acciones. El Íbex tiene la barrera inferior en 10.400 puntos, un poco más abajo de los puntos actuales (10.514) mientras la barrera de los 11.000 se hace infranqueable.
El bono a diez años, estable
El bono a diez años se mantuvo estable; subió el viernes hasta el 2,572 %, mientras que el martes alcanzó un mínimo histórico de 2,478 %. La prima de riesgo española se sitúa en 143 puntos aproximadamente (la diferencia del interés español con el alemán). Por este mismo efecto del ascenso del español, el alemán, que había alcanzado máximos del 1,17 %, descendió al 1,12 %.
