El presidente de la empresa energética Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, fue el protagonista de una conferencia de prensa que se celebró en Londres para hacer balance del pasado año 2013 y enunciar cuáles serán los planes de la institución para un futuro cercano. El líder de la entidad se mostró molesto con la política energética llevada a cabo por el actual Gobierno, por lo que afirmó que las próximas inversiones se realizarán en aquellos países que gocen de planes con mayor estabilidad. “Las inversiones irán destinadas principalmente a los proyectos energéticos y países que disfruten de una regulación predecible y estable. El regulador dice que sobran inversiones en redes y generación y si el regulador dice eso para qué lo vamos a hacer”, enunció.
Además, se lamentó del poco beneficio que obtienen en España, por lo que admitió que “en estos momentos somos más británicos, estadounidenses y mexicanos que españoles”. Los países a los que hacía referencia Sánchez Galán son aquellos donde la empresa obtiene una gran parte de su porcentaje de ganancias, es decir, Reino Unido (41%), Estados Unidos (17%) y Latinoamérica (23%). A estos tres países, se les añade México, donde ya Iberdrola ya es el primer productor privado.
Se invertirán 9.600 millones de euros
Respecto a los planes de futuro, la compañía energética piensa invertir 9.600 millones de euros. De dicha cantidad, prácticamente la mitad – el 46% - irá destinado a la elaboración de nuevas infraestructuras, y el 54% restante se empleará en mantener y mejorar las instalaciones usadas en la actualidad. En cuanto a España, se llevará a cabo una reducción “progresiva hasta que haya una coyuntura que haga atractivas las inversiones” debido “al significativo impacto de las modificaciones regulatorias y fiscales en las cuentas del grupo”. Estas medidas a las que el presidente hacía referencia son aquellas por las que la empresa vio disminuir sus beneficios un 7%, o lo que es lo mismo, 800 millones de euros menos en la parte del activo. Desde la llegada de Galán a la empresa, allá por 2001 como consejero delegado, el grupo ha ganado menos dinero en España.
La coincidencia de estos resultados negativos con su gestión la ha querido paliar recordando que el progreso de Iberdrola en cuanto a inversiones puede dividirse en 2 fases diferentes: por un lado, negocios energéticos y crecimiento en España y Latinoamérica; y por otro lado, la expansión internacional. En este último se recoge la adquisición de ScottishPower, de la estadounidense Energy East -actualmente Iberdrola USA- y de la brasileña Elektro, así como la destacable expansión de su actividad en energías renovables, donde cuenta con casi 14.250 MW de potencia y es el líder mundial tras invertir 22.000 millones de euros.
Aprovechó para poner de manifiesto su disconformidad con la nueva política y fijación de precios: “Como ingeniero, hacer un sistema de tarifas en tiempo real me parece magnífico, pero con lo que he oído me parece imposible su aplicación”. El presidente reconoció que esta actividad pierde dinero en estos momentos “y si pierde dinero habrá que cerrarlo”. En referencia al cierre de centrales, reconoció que es muy poco probable que la central de Garoña se vuelva a abrir. "Es una pena que una central eficiente y segura se haga inviable con cargas como hacen con el resto del parque nuclear", comentó.
Errores europeos
En la búsqueda de la justificación de los hechos, Sánchez Galán afirmó en varios de los países de Europa continental, entre los que se incluye España, ha habido errores en el manejo de los 3 principales timones de una política energética, lo que han conducido a lo siguiente:
La seguridad del suministro, la competitividad y la sostenibilidad principales fallos
En primer lugar, una situación de sobrecapacidad, que está arrastrando al cierre a numerosas instalaciones eficientes y básicas para garantizar el suministro eléctrico. En segundo lugar, se ha potenciado el uso de la energía solar, que es más cara que la eólica o la hidráulica. Y por último, se ha seguido explotando el carbón, que además de ser la energía más contaminante, se ha descartado el uso de centrales modernas de ciclo combinado de gas. Evidentemente, a más coste de producción mayor encarecimiento de precios, lo que explica que España tenga un precio 2,5 veces por encima de Estados Unidos.
Por su parte, el director general, José Luis San Pedro anunció que la empresa "defenderá ante los tribunales" los intereses de sus accionistas ante varios aspectos "de dudosa legalidad" de la reforma, como por ejemplo el hecho de los recortes en la retribución de la distribución y las actuaciones llevadas a cabo con carácter “retroactivo”.
Previsiones
El objetivo del plan de inversiones, es lograr un aumento de los beneficios brutos de explotación, así como el incremento de los beneficios netos, establecido en 4% según en la estimación para este 2014. Este porcentaje supondría de un dividendo de 0,27euros por acción.
Otro objetivo en espera es el de la reducción de la deuda. Se prevé que esta se reduzca 1.800 millones, quedándose en 25.000 millones a final de trienio. Dicha modificación significa que el apalancamiento se reduciría por segundo año consecutivo, pasando del 44% al 40%, tras haberlo hecho en 2013 de 47 a 44%. Esta maniobra lleva implícito para lograrlo con éxito la desinversión en países no estratégicos y en activos por valor de 500 millones, lo que en multiplicado por 4 años (2012-2016) significa 2.500 millones de ahorros acumulados.
Los que más pierden: los trabajadores
En este nuevo proyecto, los más damnificados serán los trabajadores. La entidad pretende congelar salarios y reducir la plantilla, mediante bajas vegetativas, en un número de 1.000 personas, quedándose con una estimación de 27.000 empleados. No se esperan nuevas contrataciones salvo nuevos proyectos futuros que requieran de un mayor número de trabajadores.