Aún recuerdo mi primera toma de contacto con Vavel. Ha llovido mucho desde que este gran proyecto creado por Javier Robles vio la luz. Me viene a la mente mi primera conversación con el "cazatalentos" de Javier, en la que me ofrecía poder escribir para Vavel, tras "espiarme" por la red. Fue en un encuentro extraño y no voy a engañar a nadie, un poco incrédulo por mi parte. Sabedor de que en la red se pueden encontrar a muchas y a la vez distintas personas, mi instinto de descofianza natural, salió al hablar de mi fichaje por VAVEL.
Nunca imaginé que aquella red social que me presentó Javi pudiera llegar tan alto y a cotas tan impensables como ha acabado sucediendo. Ver a compañeros míos narrando un encuentro a pie de campo del Calderón, a otro entrevistando a Vicente del Bosque tras un partido de la selección y a otros muchos entrevistar a estrellas y personalidades del deporte, acabaron derrumbando mi desconfianza, si es que alguna vez la tuve, porque he de decir que Javi no solamente sabe vender bien la moto, si no que además te da respuestas a todas las preguntas, te echa la bronca cuando hace falta, te ayuda en lo que le pidas y sobre todo te inspira con su ilusión por este proyecto.
Siempre podré decir orgulloso que fuí uno de los primeros en subirme a este barco de la ilusión, en el que nunca creí verme navegando. Muchos compañeros tienen con Vavel la oportunidad de poder dedicarse para lo que han estudiado, periodismo, pero mi caso es bien distinto. Para mi Vavel significa el lugar donde poder expresarme, el sitio donde mi voz es tenida en cuenta y la casa que siempre me acogerá.
Mi devoción por el Calcio, me hizo entrar en el mundo vaveliano, al que siempre estaré eternamente agradecido. Siendo bloguero conocí a otra de las personas más importantes de este proyecto, al gran Jose Antonio Vega, más conocido como "Joseph", con el que he tenido el honor y el placer de formar parte de la familia de The Best Football, un programa donde lo de menos era la información dada y lo más gratificante era salir del programa con una sonrisa de oreja a oreja y con los ojos humedecidos del gran momento pasado con todos los grandes amigos que me llevo para siempre.
Tanto en The Best Football, como en Retransmisión Deportiva y en los Jugones he conocido a excelentes profesionales, pero sobre todo a grandes personas, que siempre que ha hecho falta ponen todo su ser a disposición de lo que haga falta, lo han hecho sin importarles lo más mínimo. Tengo la certeza de que dentro de unos años, cuando algunos estén en la radio, otros a pie de campo y alguno en televisión, me sentiré orgulloso de haber compartido con ellos esta gran experiencia, que me ha curtido de manera sobrenatural en el plano personal.
También tengo la esperanza de en un futuro no muy lejano, poder decirles a mis hijos y a mis nietos orgulloso: "Ese que está en radio, televisión o prensa estuvo conmigo en Vavel", porque la ilusión y los sueños de todos los que forman parte de este proyecto merece ser reconocido. Aquí nadie es más que nadie, aquí todos somos un sueño, remando en la misma dirección y con el deseo de poder engrandar todavía más este fenómeno que no tiene límites y que como una criatura monstruosa acaba y puede con todo. Vavel es así. Solamente puedo dar las gracias por tanto esfuerzo cosechado a todos y a cada uno de los que conforman una plantilla que tiene más valor que las del Barcelona, Real Madrid o Manchester City.
Una mención especial para todos aquellos con los que he tenido el placer de poder relacionarme más. A los Eilex, George, Vaic, Facu, Kevin, Bascoy, Santy, Bruno, Edu, Germán, Alberto y muchos otros que me dejo, solamente deciros que guardo todos y cada uno de los momentos pasados con vosotros y a Javi por dejarme formar parte de esta familia, por no bajar los brazos nunca y sobre todo por confiar en mi y a Joseph por su amistad, su entusiasmo, su alegria y su constante sacrificio que han ayudado a crecer de manera bestial a Vavel.
De VAVEL, sí, y hasta la muerte.
