Atacarse con estilo. Ese parece ser el leitmotiv de la música pop actual. Y si no, que se lo digan a Taylor Swift y a Katy Perry. Ambas divas han entrado en una batalla ‘micro a micro’ en las que no solamente son ellas las protagonistas, sino también su grupo de amigos y de amigas.
La manzana de la discordia no ha sido otra que uno de los últimos temas de Taylor Swift, Bad Blood que incluye frases del estilo de ‘tengo cicatrices en la espalda del puñal que me clavaste’. Según confirmó la propia Taylor en una entrevista a la revista Rolling Stone, la canción iba dirigida a “otra artista femenina que me quiere hundir y hacer la vida imposible”. Y teniendo en cuenta que para el vídeo de Bad Blood, Swift decidió rodearse de su selecto grupo de amigas y amigos (entre los que se encuentran Selena Gómez, Cara Delevigne, Lena Dunham o Cindy Crowford) pero no incluyó a Katy Perry, la cosa parece estar bastante clara.
Según contó Taylor, Katy fue la primera en comenzar la guerra, al intentar sabotearle una gira contratando a todo el equipo a sus espaldas. A esta acusación, Katy Perry respondió con un irónico tweet que recordaba a todos sus seguidores que tuvieran "cuidado con la Regina George con piel de cordero", comparando a la malvada de la película Mean Girls [Chicas Malas] con Swift.
Parecía que todo iba a quedar en un mero cruce de acusaciones veladas, pero nada más lejos de la realidad. Después de que Katy sacase una nueva canción 1984, compuesta por Katy Perry y su chico, John Mayer, que también estuvo con Taylor Swift durante algún tiempo. El título hace referencia al año de nacimiento de Katy Perry, al igual que el último disco de Taylor Swift, 1989, también hace referencia a su año de nacimiento.
Además, la cantante también ha decidido recurrir a sus amigas para contraatacar a Swift. Pero en este caso, no ha sido en uno de sus vídeos, sino en el de su amiga Madonna. Para su nuevo vídeo, Bitch, I'm Madonna, la reina del pop si que ha contado con Katy Perry entre su grupo de amigas. Y junto con ella, la cantante también ha contado con Beyoncé, Miley Cyrus, Rita Ora, Nicki Minaj, Jon Kortajarena o Alexander Wang, lo que nos da una idea de que no ha escatimado en colaboraciones.
Así, vestida de Moschino y mostrando su lado más irreverente, la gran diva del pop no ha dudado en demostrar, una vez más, quién es la verdadera reina del pop. Parece ser que la guerra va para largo, puesto que ya no se trata de un cuerpo a cuerpo entre Katy Perry y Taylor Swift, sino que Madonna ha entrado en el juego. Y competir contra Madonna, es complicado.