Río de Janeiro ha transformado la basura acumulada en la ciudad en arte, con el objetivo de poner a la vista los trabajos de limpieza que se están realizando de cara a la celebración de los Juegos Olímpicos en 2016.
Los objetos de arte forman parte de la exhibición “Achados da Guanabara”, es decir, “Hallados en Guanabara”, que persigue personalizar la contaminación y concienciar a la población para que sean más cuidadosos y responsables con los residuos que se arrojan al mar.
Estos artículos reconvertidos en arte se exponen en el centro comercial de Río de Janeiro, bajo carteles con precios excesivamente altos. Sin embargo, los 60.000 dólares de un ordenador roto, los 16.000 de una vieja silla de plástico o los 8.000 de una mochila, no representan su precio de compra, sino el coste medioambiental que suponen estos desperdicios.
Como parte de su compromiso olímpico, Río prometió limpiar el 80% de la bahía de Guanabara, lugar en el que se celebrarán las competiciones de vela y windsurf de los próximos Juegos y en la que se han encontrado todo tipo de desperdicios, desde antiguos sofás hasta restos de animales.
La limpieza de la bahía de Guanabara fue fundamental en la propuesta de Río para quedarse con los Juegos
Cabe destacar que la limpieza de la bahía de Guanabara fue una parte vital de la propuesta de la ciudad para quedarse con los Juegos. Sin embargo, a quinientos días del inicio de la competición, los altos cargos del Gobierno ya han admitido que la limpieza no estará terminada para la fecha.
A pesar de los millones de dólares invertidos en la limpieza de la bahía durante los últimos años, los impulsores de la exhibición advierten que será imposible terminar el trabajo sin un mayor apoyo gubernamental y, sobre todo, una verdadera concienciación pública.