A lo largo de todo el día de ayer, algunos rincones de la geografía española como Madrid, Galicia, Valencia o Mallorca acogieron diversos actos en solidaridad con los fallecidos en Francia y en los que se reivindicó una vez más la libertad de expresión.
De entre estas concentraciones, que coincidieron con el gran homenaje convocado en París y otras grandes ciudades europeas para rechazar la violencia terrorista, destaca la convocada en la capital madrileña por su mayor poder de convocatoria.
La capital española se declaró "Charlie" con sus concentraciones en Atocha y Sol
Allí, cientos de personas se lanzaron a las calles en dos concentraciones que, aún siendo independientes, tenían una misma intención: mostrar su repulsa a los atentados terroristas cometidos durante la semana en Francia, que se cobraron la vida de 20 personas.
El primero de los actos, en la mítica Puerta del Sol, fue convocado por un grupo de estudiantes franceses a través de las redes sociales. En él, unas 400 personas, la mayoría de nacionalidad gala pero también miembros de una asociación judía, mostraron los ya conocidos carteles de "Je suis Charlie" ("Yo soy Charlie"), en referencia al semanario satírico Charlie Hebdo, en el que 12 personas perdieron la vida a manos de dos supuestos yihadistas.
Otros manifestantes se unieron a la concentración convocada en Atocha por la Fundación Cultura Árabe (Funca), que contó con la asistencia de un nutrido grupo de musulmanes y varios de sus imanes. En declaraciones a los medios, el presidente de la Fundación, Said Ida Hassan, quisó trasladar el mensaje de que "nadie puede cometer crímenes en nombre del Islam".
El presidente de la Fundación Cultura Árabe rechazó cualquier radicalismo
En la misma línea, Ida Hassan se posicionó en contra de todo tipo de radicalismo y manifestó no tener miedo de que se produzcan represalias hacía la comunidad árabe en España, ya que "la respuesta de la sociedad española después de los atentados del 11-M fue ejemplar". Por último, apeló a la responsabilidad de "autoridades españolas y del conjunto de la sociedad política y civil" para rechazar el comportamiento de los autores de posibles actos de 'islamofobia'.
Celebrada frente al monumento a las víctimas del 11 de marzo de 2004, esta concentración concluyó con la lectura de un manifiesto y un enorme aplauso. A lo lejos, como no podía ser de otra forma, se vislumbraban multitud de carteles con consignas muy claras: "Ni yihad, ni cruzadas. Respeto, por justa paz", "No matarás vale para todos" o "No en mi nombre".
Musulmanes de la mezquita de la M-30, conmocionados
Los musulmanes que acudieron ayer a la mezquita madrileña situada en la M-30 para rezar o llevar a sus niños a clase de árabe se mostraron igualmente conmocionados por estos atentados perpetrados por terroristas que, han enfatizado, “no representan al islam”, una "religión de paz".
La comunidad musulmana recalca que los atentados "no representan al islam"
A las puertas del templo, un grupo de marroquíes dispuestos a personarse luego en la manifestación de la glorieta de Atocha, repudieron lo sucedido. Es el caso de Hassan Mohamed quien, tras más de 22 años residiendo en España, recordó en unas declaraciones a Efe que el islam, como el cristianismo, considera un pecado matar o hacer daño a alguien.
