Podría pertenecer al ámbito de la ficción, pero la nueva Línea de la Seda es una realidad y más de 10.000 kilómetros de distancia forman el recorrido de tren más largo jamás contado. Comenzando en el extremo más oriental de China, este tren se inauguró el pasado 18 de noviembre partiendo de la pequeña ciudad de Yiwu y cruzará hasta ocho países antes de alcanzar la capital española. Está previsto que la llegada a Madrid sea la segunda semana de diciembre, contando así con más de veinte días de viaje en los que pasará por China, Kazajistán, Rusia, Bielorrusia, Polonia, Alemania y Francia.
Se trata de un viaje de prueba que transporta toneladas de productos de “todo a un euro”, especialmente adornos y juguetes en vistas a las próximas Navidades, aunque también incluye algunos productos caros como coches y aparatos tecnológicos. La mayor parte de este cargamento terminará en el polígono Cobo Calleja de Fuenlabrada, el mayor centro empresarial chino de Europa.
No es de extrañar que el punto de partida de este tren sea Yiwu, dado que en 1982 fue nombrada “ciudad del pequeño comercio” por el autoritario régimen de Pekin, y desde entonces no ha dejado de crecer. Hoy en día se trata del mercado de pequeñas mercancías más importante del mundo y en torno al 80% del comercio mundial se concentra en esta ciudad donde se comercializan todo tipo de productos a precios imbatibles.
Según El Diario del Pueblo, un medio de comunicación chino, el secretario del Partido Comunista de la ciudad ha dicho durante la inauguración de la línea que “Yiwú fortalecerá la cooperación económica con los países y regiones a lo largo del trayecto para desarrollar el comercio y convertirse en el punto de partida del cinturón económico de la Ruta de la Seda”.
La puesta en marcha de este tren de mercancías es un hito para la historia del ferrocarril.
La puesta en marcha de este tren de mercancías supone por tanto un hito para la historia del transporte por ferrocarril, dado que supera en unos 1000 kilómetros al legendario Transiberiano ruso. Este proyecto se presenta como una adaptación del espíritu comercial que reinaba en la Ruta de la Seda, de hecho el presidente de China, Xi JinPing, ha declarado su interés en recuperar algunos tramos de dicha ruta, promoviendo así el transporte de mercancías terrestre, más rápido que el marítimo y más económico que el aéreo. Con el fin de mejorar las infraestructuras ferroviarias, Pekín ya ha preparado una inversión de 32.000 millones de euros y tiene previstas varias rutas de acceso a Europa.
De momento, el Yixin'Ou es un tren en pruebas operado por la empresa Trans-Eurasia Logistics, una sociedad formada por la alemana Deutsche Bahn AG y Ferrocarriles de Rusia en colaboración con China. Si el viaje resulta rentable y regresa a China con productos españoles, sobre todo alimenticios, podría crearse una línea regular Yiwu-Madrid para la primavera de 2015, un proyecto único que conectaría aún más Oriente y Occidente en favor de la globalización mundial.
