“La mujer no tiene que ir a la moda, tiene que tener criterio”. Así veía el mundo de la moda la diseñadora catalana. Y ella, desde luego, tenía criterio. Carmencita se crió entre ropa, y entre ropa ha muerto. Finalmente, el cáncer contra el que llevaba años luchando le ha ganado la batalla a los 68 años. Pero su vitalidad aún pervive entre aquellos que la conocieron.
Carmencita (Sita) Murt nació en Igualada en 1946. Su padre era propietario de una empresa de curtidos, y ya desde pequeña cogía trozos de cuero para pegárselos en la ropa. Así era ella, curiosa e incansable. Y, como no podía ser menos, estudió en la Escuela de Diseño Textil de Sarriá. Se casó con Toni Esteve Enrich, gestor de la empresa de su familia, Esteve Aguilera, dedicada principalmente a producir jerséis.
Su peor y su mejor momento llegó, tristemente, acompañado de la desgracia. Tras la muerte de su marido, en 1984, el suegro de Sita confió en ella para que gestionase la empresa, aunque fuese ‘mujer y joven’. Y a partir de ahí el resto es historia. Con sus hijos ya mayores, comenzó a innovar y a crear nuevos modelos y no paró hasta que lo revolucionó todo. Decidió crear su propia marca, pero teniendo siempre el punto como leitmotiv.
Por supuesto, las cosas no siempre fueron fáciles. La crisis le afectó muy duramente. Casi al borde de la desaparición, la firma logró superar un concurso de acreedores en 2013, que hizo que tuviesen que reducir enormemente su estructura, y, en los últimos tiempos, las cosas también fueron complicadas, pese a que la inauguración de la tienda on-line ofrecía muchas esperanzas. Sin embargo, ella mantenía la sonrisa. “Pienso que todo lo que pasa es una enorme recompensa”, decía ella.
“Pienso que todo lo que pasa es una enorme recompensa”
Sita no se aferraba a las tendencias. Se aferraba a sus tendencias, y a sus ideales. Se inspiraba en esas mujeres trabajadoras que no dejan que nada ni nadie las pare, y ella misma fue el ejemplo de ello. Desfiló en varias ocasiones en la pasarela Cibeles y en la 080 de Barcelona y vistió a mujeres como María Valverde o Eugenia Silva. Ahora todo queda en manos de sus hijos. A través de un comunicado, su empresa se lamentaba de la muerte de la diseñadora:
“Sita Murt nos ha dejado. Ha muerto hoy, acompañada de los suyos, con serenidad y valentía, la que siempre ha tenido. Nuestra queridísima Sita deja un vacío difícil de llenar: su energía, su simpatía, su actitud vital de vivir todos los momentos con intensidad, los buenos y los malos… nos acompañará siempre. En Esteve Aguilera SA tenemos la suerte de haber compartido todo tipo de vivencias con ella, siempre enriquecedoras, siempre especiales. Una mujer luchadora, creativa y tenaz que nos ha enseñado a trabajar con pasión. Su legado será el aliento para caminar hacia el futuro con ilusión. Continuaremos el viaje que ella empezó: lo haremos por nosotros y lo haremos por ella. ¡¡Siempre Sita!!!”