El Íbex-35 consiguió un ascenso del 2,72 % durante la semana y se situó en 10.500,20 puntos al terminar la sesión del viernes. En una semana marcada por las comparecencias de Mario Draghi y Janet Yellen, el selectivo consiguió una gran jornada el jueves, mientras el viernes frenó su ascenso, en ambos casos marcados por los discursos de los máximos mandatarios del BCE y la FED respectivamente. Mientras Draghi el jueves se mostró dispuesto a seguir con las medidas expansivas y preparado para actuar si hiciera falta, cosa que hizo subir la bolsa un 1,28 %, de 10.420 a 10.555 puntos, pero el ambiguo discurso de Yellen el viernes hizo bajar un 0,53 %. Durante el tercer trimestre el Íbex ha perdido un 4 %, dinámica que sitúa a la bolsa en las peores cifras desde el segundo trimestre de 2013, aún así marcó el mayor ascenso en las bolsas europeas. Todas las empresas han acabado en verde.
Las tensiones en Ucrania siguen generando dudas a los inversores. Esto es porque los inversores prefieren tener el líquido en mano que arriesgar y perder la inversión, debido, por ejemplo, a las limitaciones de las importaciones rusas, o a la inestabilidad geopolítica.
Por su parte el bono español a diez años vuelve a romper mínimos, llegando a bajar del 2,38 %, con la prima de riesgo aproximadamente en 140 puntos.
Foto: Tradingeconomics.com (Evolución en 2014 del bono a diez años español).