Los premios Grammy se celebran cada año para reconocer a los artistas más destacados de la industria de la música. Es una de las cuatro galas que se celebran anualmente en EEUU y una de las más importantes del mundo, pudiendo considerarse como los premios Óscar de la música. Este año la fecha escogida para la ocasión ha sido el 26 de enero y el lugar el Staples Center de Los Ángeles. La expectación que generan estos gramófonos es tal que son retransmitidos en directo en más de medio mundo. Sin embargo, el fanatismo que despiertan se canaliza asimismo en el estilismo y modelos enfundados por la gran cantidad de personalidades asistentes al acto. Esta vez el color predominante ha sido el blanco, y prueba de ello es la ingente cantidad de artistas que ha decido apostar por esta tonalidad para la ocasión.

(Foto: Blogi Indian Expres).

Artistas como Katy Perry, Beyoncé, Rihanna o Paris Hilton no han dudado a la hora de encomendarse a grandes diseñadores como Valentino o Gucci, quienes han bañado de una nívea tonalidad el ambiente. La joven y polémica artista Miley Cyrus no ha querido ser menos y ha optado por un look muy casual, enfundada en un abrigo en un tono malva de la nueva colección de Calvin Klein.

(Foto: Blog Indian Express).

Keltie Knight, sobre la alfombra roja, ha sido una de las más aclamadas, con vestido blanco decorado con cristales de Paolo Sebastien Couture y joyas de Michael John.

(Foto: mujerhoy.com)

Otras celebridades han decido alejarse del color imperante sobre la alfombra roja hacia tonos metalizados, como es el caso de Taylor Swift. La cantante ha optado por un vestido de Gucci con el que ha deslumbrado como nunca.

(Foto: MTV)

Aun así, hemos podido presenciar otro tipo de estilismos que han llamado la atención a todos los espectadores. Madonna, acompañada de su hijo adoptivo, decidió compartir no solo la gala con el pequeño sino también el estilismo. Un look de Ralph Lauren que ha dado mucho que hablar en las redes sociales.

(Foto: huffingtonpost).