En la entrega anterior se pudo ver como indagar en los gustos de la persona o personas a las que se desea regalar un libro. Si ya se han hecho debidamente esos deberes, ahora queda la parte más fácil, aunque, para la mayoría de la gente se hace más cuesta arriba si cabe. En este artículo se partirá de la base de que a esa persona le gusta el género de terror y a quien tiene que hacer el regalo, el terror le da un tremendo ídem.
“¡Terror! Eso son vampiros, zombis y monstruos diversos ¿no?”
Pues no necesariamente. De hecho, si se adquiere un libro de vampiros, puede que se acabe comprando una novela romántica o literatura juvenil y alguna de zombis podría resultar hilarantemente cómica. Si se va a una librería, hay que preguntar por la sección de terror y no por la de vampiros y zombies que no existe como tal.
“Si el video de Michael Jackson se titulaba Thriller, eso significa terror ¿no?”
Tampoco necesariamente. Un thriller es de intriga, por tanto estaremos ante un género que, en algunos casos y algunos libros podría rallar el terror, pero no pertenece a ese género. A la persona que queremos hacerle el regalo le podría gustar, pero es un riesgo, pues a los a amantes del terror los libros de intriga les pueden parecer flojos.
“Aquí no hay sección de terror, tiene narrativa española, extranjera, best sellers, juvenil y humor”
No todas las librerías disponen de las mismas secciones. Si no se ha tomado nota del autor o autores que suele leer la persona a quien se quiere hacer el regalo, lo mejor es preguntar por los clásicos y los grandes maestros del género. Las probabilidades de fallar se minimizan y como mucho se podría adquirir un título que esa persona ya tenga en su biblioteca, pero agradecería el detalle de que se sepa lo que le gusta. Así que habría que preguntar por H.P. Lovecraft, Edgar Allan Poe, Stephen King o Dean Koontz como nombres básicos en el género de terror. También se puede preguntar por Bram Stoker o Mary Shelley, autores de “Drácula” y “Frankenstein” respectivamente, pero debemos tener en cuenta que sus novelas son precursoras del género y que no se engloban estrictamente en el terror aunque sin duda los dos títulos mencionados y alguno otro menos conocido, están muy bien considerados por los amantes de este género.
“Yo soy de los que le pregunto al librero y me indica el mejor libro”
El error más común es pensar que el librero nos va a indicar el libro más adecuado. Lo que siempre te va a sugerir es el libro de moda o ese libro que no vende ni a tiros. El éxito del momento, el “superventas”, o el libro que nunca se consigue vender y lleva años cogiendo polvo en las estanterías puede acabar convirtiéndose en la particular historia de terror de aquel a quien se le regala. Una cosa buena que tienen los verdaderos amantes de la lectura, es que rara vez cambian un libro. La mala es que tienen las estanterías llenas de libros que han empezado o intentan leer por obligación porque alguien se lo regaló, pero cuando empiezan a leerlo se aburren y piensan en lo que de verdad querrían estar leyendo. Nunca debe pedirse consejo a un librero. La indagación ya se ha tenido que hacer previamente a la visita a la tienda, preguntar a un extraño que no conoce al amigo o pariente de nada, solo puede empeorar la situación. Es muy probable que se acabe comprando la saga completa de “Crepúsculo” que es ficción romántica y para algunos no se parece al terror ni por asomo.
“Mi sobrina tiene toda la saga de las Crónicas Vampíricas de Anne Rice”
Las novelas de Anne Rice son un subgénero dentro del terror en sí mismo. Para unos son de terror y para otros son románticas. En cualquier caso, es una autora muy prolífica y con muchos títulos para elegir, si tiene toda la saga de “Crónicas Vampíricas” lo propio sería regalarle el primer libro de la saga de “Las Brujas de Mayfair”.
“Mi hermana devora los libros de Crepúsculo”
Lo que necesitas es amor. No estas buscando un libro de terror sino literatura romántica con un pequeño toque de peligro y alguna dosis de horror. La literatura fantástica, en la que se engloba esa saga, puede servirnos, pero no es realmente terror- aunque algunos lo consideren así-, luego lo suyo sería acudir a la sección de ciencia-ficción o literatura juvenil, leer las contraportadas de los libros y observar en cual de ellas aparece una historia tipo Montescos y Capuletos.
“He encontrado la sección de terror, pero estoy flipando la cantidad de autores que hay”
Ya se ha visto que los clásicos suelen ser una opción segura, pero si queremos sorprender con algo distinto, leer las contraportadas de los libros nunca está de más. Si alguna historia nos sugiere intriga, una ambientación sobrenatural y la portada tiene algo que te da miedo y no tienes muy claro porqué ¡ese es el libro que andas buscando!
En próximas entregas: Como evitar que el librero me endiñe un libro que no se ajusta a lo que busco.