Si bien en el entorno bursátil sabemos que la cotización de un activo no tiene porqué apoyar lo que dicen las noticias o la coyuntura económica, también es cierto que no debemos olvidarlas. El índice nipón ha superado en lo que va de año una revaloración del 50% por lo que no es de extrañar que veamos las caídas que estamos viendo estos días. La política expansiva que está llevando el Banco de Japón parecía que comenzaba a dar frutos. Incluso Haruhiko Kuroda se aventuraba a decir que la economía de Japón comenzaba a recuperarse, sin embargo, parece que lo dijo demasiado alto y el Nikkei225 se percató de ello.

El jueves de la semana pasada el Nikkei se desplomó literalmente perdiendo en una una sola sesión un 5.15%. Uno de los indicadores más bajistas que existen en bolsa es el de la opinión contraria. Esta teoría dicta que cuando todos hayan comprado, nosotros debemos de vender o como poco estar fuera del mercado, es decir, que las grandes caídas bursátiles están precedidas por momentos de euforia y optimismo exagerado. En el pasado reciente esta teoría ha demostrado funcionar con la precisión de un reloj suizo, solo hace falta echar un vistazo a las subidas del año 2000 (Boom tecnológico) y al año 2007 (Crisis de las hipotecas). Sin embargo, ahora mismo nos encontramos en un momento no de euforia pero sí quizás de un optimismo un poco descontrolado, al menos en lo que al entorno bursátil se refiere.

En España no notamos ese optimismo porque lo nuestro merece un capítulo aparte, pero en países como Alemania, parece ser que el estado de "crecimiento" está durando demasiado. EEUU parece estar "acertando" con la política económica que está llevando a cabo, no obstante Japón o mejor dicho el índice japonés, avisa de sucesos que pueden darse en un momento dado y sin previo aviso. El único inconveniente es que no todo el mundo considerará esto como tal.

La regla de los cinco años

Realmente no es una regla propiamente dicha, pero sí que sabemos que tras el estudio histórico de las cotizaciones y de las tendencias bursátiles en un gran número de ocasiones los grandes movimientos alcistas duran de media entre los cuatro años y medio y los cinco años. Unas veces duran más y otras veces menos. Ahora mismo, en el caso de el Dax30 (índice alemán) desde que hiciera un mínimo el 9 de marzo de 2009, lleva en tendencia alcista cuatro años y casi tres meses. Dicho esto que cada cual extraiga sus conclusiones. En mi humilde opinión aunque por supuesto no seguro, sí que es probable que dentro de no mucho veamos grandes caídas bursátiles que siembren el pánico en los inversores.