La selección de fútbol de Georgia, conocida como los "Guerreros del Cáucaso", ha tenido una historia relativamente reciente y llena de altibajos desde su formación tras la independencia del país en 1991. La Federación Georgiana de Fútbol (GFF), fundada en 1990, es la responsable de la administración del equipo.
El primer partido oficial de la selección de Georgia se disputó el 27 de mayo de 1990 contra Lituania, terminando en un empate 2-2. Este fue un momento simbólico ya que ocurrió poco antes de la declaración de independencia del país el 9 de abril de 1991. La GFF se unió a la FIFA y a la UEFA en 1992, lo que permitió a Georgia participar en competiciones oficiales.
El primer torneo de clasificación al que Georgia se inscribió fue la Eurocopa 1996. Aunque no lograron clasificar, el equipo mostró promesa al terminar en tercer lugar de su grupo, por delante de Gales y Albania. A pesar de los desafíos iniciales, estos primeros años fueron fundamentales para el desarrollo del fútbol en Georgia y sentaron las bases para futuros éxitos.
Durante las eliminatorias para la Copa del Mundo de 1998, Georgia mostró un buen desempeño, terminando en cuarto lugar en su grupo, empatado en puntos con Polonia. Alcanzaron el puesto 42 en el ranking mundial de la FIFA, un logro notable para una nación tan joven en el escenario internacional.
En las siguientes campañas de clasificación, Georgia no logró clasificarse para los torneos de 2002 y 2006. Sin embargo, registraron algunas victorias memorables, incluyendo una victoria 2-0 sobre Albania y un triunfo 2-1 sobre Kazajistán en las eliminatorias de 2006.
En la Eurocopa 2000, Georgia tuvo una campaña de clasificación difícil, ganando solo un partido y terminando en el último lugar de su grupo. Este periodo marcó un declive en el rendimiento del equipo, aunque la experiencia adquirida fue valiosa para los jugadores y la administración.
Durante la clasificación para la Eurocopa 2004, Georgia nuevamente luchó por obtener resultados positivos. Terminaron en el quinto lugar de su grupo, aunque lograron una victoria notable sobre Rusia con un gol de Malkhaz Asatiani, destacando la capacidad del equipo para competir contra rivales más fuertes.
En las eliminatorias para la Eurocopa 2008, Georgia mostró un rendimiento más competitivo, terminando en el sexto lugar de su grupo, con victorias significativas sobre Escocia y las Islas Feroe. Sin embargo, no lograron avanzar al torneo final. En las eliminatorias para la Eurocopa 2012, el equipo continuó enfrentando desafíos, terminando en la parte baja de su grupo.
En la clasificación para la Eurocopa 2016, Georgia logró una destacada victoria 1-0 sobre España en un amistoso previo al torneo, aunque no logró clasificarse. Durante la campaña de clasificación para la Eurocopa 2020, Georgia tuvo una racha decepcionante, pero se destacó por su desempeño en la Liga de Naciones de la UEFA, donde logró el ascenso y participó en los playoffs.
Kaladze es uno de los futbolistas más reconocidos de Georgia. Defensor sólido y líder nato, tuvo una carrera exitosa en clubes como el AC Milan y el Dinamo de Kiev. Fue un pilar en la defensa de Georgia y sirvió como capitán del equipo nacional.
Arveladze es conocido por ser uno de los goleadores más prolíficos de Georgia. Tuvo una destacada carrera en clubes como el Ajax, el Rangers y el Trabzonspor, y fue un jugador clave para la selección georgiana.
Kinkladze se destacó en la década de 1990, particularmente durante su tiempo en el Manchester City, donde era conocido por su habilidad técnica y su capacidad para crear oportunidades de gol.
Kobiashvili tuvo una carrera larga y exitosa en la Bundesliga con clubes como el Schalke 04 y el Hertha BSC. Fue un jugador versátil, conocido por su resistencia y su contribución tanto en defensa como en ataque.
Ketsbaia es recordado por su tiempo en equipos como el AEK Atenas, el Newcastle United y el Anorthosis Famagusta. Tras su carrera como jugador, se convirtió en entrenador y ha dirigido a la selección de Georgia en varias ocasiones.
Chivadze fue uno de los primeros entrenadores de Georgia tras su independencia y jugó un papel crucial en la formación inicial del equipo nacional. Conocido por su enfoque táctico, ayudó a sentar las bases del fútbol moderno en Georgia.
El entrenador alemán dirigió a Georgia a principios de la década de 2000. Bajo su liderazgo, el equipo mostró mejoras significativas, incluyendo algunas victorias notables en partidos de clasificación.
Ketsbaia, un exjugador destacado de Georgia, asumió el cargo de entrenador del equipo nacional en varios períodos. Es conocido por su enfoque apasionado y su deseo de desarrollar el fútbol georgiano, promoviendo un estilo de juego dinámico.
El entrenador eslovaco dirigió a Georgia en la década de 2010. Fue elogiado por su enfoque táctico y por lograr que el equipo jugara de manera más cohesiva y competitiva en el escenario europeo.
La selección de fútbol de Georgia, aunque ha enfrentado numerosos desafíos a lo largo de su historia, ha mostrado una determinación constante y ha producido jugadores y entrenadores de alta calidad. Con una base de aficionados apasionados y un espíritu competitivo, Georgia sigue siendo una presencia notable en el fútbol europeo.