A veces pensamos que no llegamos con nuestro trabajo, nuestra carrera o dedicaciones a todo, incluso a lo que más queremos, a nuestras pasiones. Paqui Rodríguez, "La Morena", lo ha conseguido y de manera exitosa. A su labor como doctora ha unido una carrera en la interpretación en la que ha ido subiendo pasos, hasta la publicación de su primer disco.
“Mi Destino” es el nombre que da título al álbum lanzado el pasado junio junto a “Vidas Paralelas”, libro que nos permite conocerla mejor y el como ha llegado a este momento de su vida.
Entrevista
Pregunta: Doctora, cantaora, bailaora, escritora, monólogos… ¿qué es lo siguiente a lo que te puedes dedicar?
Respuesta: Me va mucho el “artisteo”, de hecho, iba a participar en un corto de un director francés, pero por problemas de horario por mi trabajo en el hospital fue imposible. Me gusta mucho el teatro o el cine, pero lo veo muy complicado.
P: Sin embargo, si hay algo que te guste por encima de todo, es el flamenco.
R: Me encanta, pero ahora que tengo mi propia música, me gusta cantar el mío. Escribo de manera muy natural, tengo 40 canciones ya compuestas.
P: ¿A qué le cantas?
R: Al amor en todas sus manifestaciones y en sus colores; desde el negro que es el abandono y la desesperanza, al rojo más latente que es la suma expresión de la palabra amor y la pasión. Y desde al amor de madre, al de hermana, hija, amiga, a la música, a la literatura, al sol, a las estrellas, al vivir o al respirar.
P: ¿En qué estilo te puedes encajonar?
R: El flamenco fusión. Del fondo de mi lienzo siempre voy a tener el flamenco, pero luego va a tener otros colores que lo matizan.
P: Y en cuanto a influencias, ¿de qué o quién bebes?
R: Escucho todo tipos de músicas y no hay nada que se parezca a lo que yo hago. Mi productor musical, que tiene muchos años en la industria, dice que no hay nada o nadie que conozca que suene igual.
Siempre voy a fusionar y lo tengo muy claro, aunque también tengo unas alegrías puras o unos tientos y tangos que van por derecho de una manera; sin embargo luego te metes en la letra, en cómo está compuesta la frase y ahí estoy yo, está la Morena.
P: Llevas años en el mundo de la música que lo compaginas con tu trabajo de directora, ¿cuánto es de complicado dedicarse profesionalmente al flamenco, más aún cuando no tienes familia que se haya dedicado al mundo de la música?
R: Eso es fundamental, porque en otra música a lo mejor no es tan importante que tu familia no esté metida en el mundillo, pero en el flamenco importa más el legado; es como ir andando por arena mojada, que cuesta más avanzar.
He llamado a Córdoba para cantar infinidad de veces, pero como Paqui Rodríguez no tiene nombre porque mis padres o mis abuelos no han sido artistas, te piden muchos papeles e información para darte una oportunidad, algo que, si no tienes apellido en otros géneros como el pop, no pasa nada. El panorama musical flamenco está muy complicado, es sota, caballo y rey.
Entre cantar flamenco y cantar pop, el primero duele mucho, tienes que sufrir como en una carrera de maratón, si no es imposible. En cambio, para otros estilos no es necesario tanto dolor en la técnica vocal, en la carencia de los tonos o en los melismas. En el flamenco se exige mucho.
P: Este año has sacado tu primer disco, “Mi destino”, ¿cómo ha sido el proceso de composición? Sobre todo, porque no tienes el 100% de tu tiempo por tus otras labores profesionales.
R: Lo que menos me ha costado es escribir, porque me sale de manera tan natural, que me sorprende hasta a mí misma. En ocasiones, trabajo de noche porque soy crono bióloga y hacemos estudios del ciclo circadiano 24 horas seguidas. Hay una hora de esas sin dormir que, o haces algo que te estimule mucho, o te vence el sueño, que es de lo más traicionero junto al hambre. Yo consigo mantenerme despierta en esos momentos escribiendo, de ahí vienen mis 40 canciones. Es un momento además entre el cansancio, el sueño y el y duermevela, que entras como en un estado subconsciente, extraño, pero donde yo consigo componer. También aprovecho cuando viajo, cuando escucho música, etc.
P: A la par del lanzamiento de disco, has sacado un libro llamado “Vidas paralelas”, ¿cómo es esa simbiosis entre ambos?
R: No concibo una cosa sin la otra, porque soy las dos partes. Necesitas saber por el libro por qué saco mi primer disco a los 47 años, por qué no lo he hecho antes. No creo que haya muchos casos en el mundo parecidos al mío, por eso he pensado que había que explicarlo y contextualizarlo. Me parecía mal sacar solo el disco y no hablar de mi parte como doctora, porque solo estoy entregando la mitad de mí.
P: ¿Con qué sueñas en el mundo de la música?
R: Quiero que mi música guste, pero cuesta mucho llegar porque hace falta dinero. Lo necesitas para que saltes a la palestra salvo que pegues un pelotazo, pero ahora solo lo haces si cantas reggaetón.
P: Uno de tus rasgos diferenciadores sobre otros artistas es que tienes que compaginar tus profesiones, algo que solo se consigue con mucha organización.
R: Pocas cosas me gustan menos que perder tiempo, más desde que estudio la cronobiología, que me ha vuelto muy organizada.
Otro elemento importante para hacer muchas tareas es dormir. Cuando no duermes, todas las conexiones neuronales que se han establecido ese día y que dejan restos, no se limpian, por eso no se tiene la mente y se está confuso, no hay un reseteo, igual que pasa con los ordenadores. Si no duermo siete u ocho horas, ni escribo ni hago nada de mi rutina diaria, soy nula, pero si duermo, hago todo.
P: ¿Qué consejo darías a esa gente que se quiere dedicar algo más allá de su trabajo?
R: Una frase simplemente “por favor, hazlo”, porque en esta vida hemos venido a ser felices. Si tú quieres algo de verdad, vas a buscar la manera de hacerlo, si no es que realmente no lo quieres. En mi caso, hasta que no he encontrado la forma, no he parado.
P: ¿Qué proyectos tienes en el futuro más inmediato?
R: Para darnos más proyección a las redes sociales, hemos contratado a una empresa alicantina para tener un contenido más profesional. También seguir creando porque no puedo dejar de escribir. Por último, estoy en un concurso nacional de cante y ando a la espera de saber si he accedido a la final con mi bossa nova.