Hemos visto muchas veces como un libro o cómic es plasmado en la gran pantalla para que pueda llegar a un público más amplio. La mayoría de ocasiones, estas adaptaciones fílmicas tienen sustanciosas diferencias con sus homólogos literarios para tener unos estándares menos cerrados y hacer las cintas más accesibles a la mayoría.
En muchos casos, esa clase de cambios llegan a escamar a los fanáticos de los libros y cómics, al darnos obras fílmicas con contenido alterado para ser más comerciales. Hoy repasamos las películas que más se distancian de sus correspondientes obras literarias, para bien o para mal.
5. "Kick-Ass: Listo para machacar" (2010)
Cuando dijeron que iban a hacer una película de Kick-Ass, los fans se alegraron muchísimo. El cómic tiene la firma del galardonado escritor Mark Millar. La obra nos ofrece una historia sólida, similar a un Quijote de la era moderna, en donde el protagonista guiado por su fascinación a los cómics decide convertirse en un superhéroe.
El cómic resulta bastante crudo y nos ofrece un universo despiadado con personajes como Hit-girl o Big Daddy. A la hora de hacer la película decidieron suavizar bastante el mensaje del cómic, cambiando casi todo hasta el punto de ofrecer un producto totalmente diferente al que debía ser.
Tenía una violencia más suave, el trasfondo de los personajes no era tan oscuro y decidieron cambiar muchos aspectos de la trama para entender el drama que vive el protagonista. Omitieron cosas como el hecho que uno de los protagonistas finge tener un pasado oscuro para ocultar tras una fachada que en verdad es un psicópata.
4. "Noé" (2014)
Este caso posiblemente sea el más curioso de todos, ya que su director, Darren Aronofsky, estuvo a cargo de la elaboración del cómic en paralelo con la película.
Para el que no lo sepa, "Noé" es una película protagonizada por Russel Crowe y Emma Watson basada en la leyenda bíblica que tiene su nombre. El cómic funcionó a modo de storyboard para ayudar al director después a plasmar su visión en la gran pantalla.
Lo curioso que este storyboard fue editado y publicado a nivel internacional cercano al lanzamiento de la película. A Aronofsky le preocupaba que su productora influyese en el montaje de la cinta, eliminando escenas y mutilando su obra de carácter personal. Esa inquietud lo llevó a plasmar este cómic junto a otro guionista y dibujante con el fin de que el mundo pudiese disfrutar de su obra tal y como él la concibió. La película fue duramente criticada por tener un ritmo lento y ser bastante aburrida, mientras que el cómic gozó de muy buena acogida. Sin duda, un caso la mar de raro.
3. y 2. "Punisher" (2004) y "Punisher: Zona de Guerra" (2008)
Desde que fue creado, "Punisher" se ha enfrentado a superhéroes y supervillanos por igual, con una polémica doctrina de la justicia que ha captado la atención del mundo.
Pero en los años 80 y 90 la calidad de sus cómics empezó a volverse cuestionable y se le apartó, condenando a morir lentamente en el olvido. Al menos, esto último hubiese sido así de no haber intervenido el guionista irlandés Garth Ennis. El autor ya había escritor para entonces las aclamadas obras como The Goddes y The Preacher catapultándose a la fama internacional.
Cuando llegó a Marvel y empezó a trabajar con “Punisher”, tuvo carta blanca para hacer lo que quisiese. Transformó al personaje en un veterano de guerra agresivo, sin moral y envuelto en un mundo salvaje y cruel. También le sirvió al autor para reírse de los superhéroes, a los que siempre había despreciado. De esta forma, “Punisher” es el personaje que conocemos hoy día.
Pero esto no se refleja en la cinta de 2004, modificando la historia y dando un trasfondo menos dramático al personaje. Solo coincidía en un par de escenas con el primer cómic de Garth Ennis sobre el personaje, pero el resto lo convertía en otra película de acción del montón malo. Y lo pésima que fue "Punisher: Zona de Guerra" es de otro planeta.
1. "Guerra Mundial Z" (2013)
Max Brooks es muy conocido dentro del mundo de las novelas, teniendo casi siempre estas una temática zombi. Fue uno de los autores que estuvieron presentes en el auge del género Z, haciéndose destacar por encima del resto al ofrecer obras con una calidad narrativa magistral.
Su obra más notoria fue "Guerra Mundial Z", que nos sumergía en la piel de un periodista que debía de escuchar los relatos de los supervivientes de un conflicto contra la pandemia zombi. Se servía del formato de falso documental de forma similar a los realizados sobre grandes conflictos bélicos. A lo largo de sus páginas recogía testimonios de civiles, soldados, políticos y famosos con el fin de entender la magnitud de la guerra.
Era una obra magistral y cuando escuché que iban a hacer una película de tan aclamada novela me ilusioné muchísimo. Nada podía prepararme para lo que vino después. La película en sí es mejorable, pero se llega a disfrutar, a menos que te hayas leído la novela. Podemos decir todo el contenido magistral omitido de la obra literaria, pero terminaría antes diciendo que en lo único que coinciden es que las dos tienen el mismo título.