Victor Boira Empezó a estudiar interpretación a los 25 años. se trasladó a Madrid donde cursó 4 años en la escuela de Cristina Rota. Participo en más de 15 montajes teatrales. Ha trabajado junto a directores de la talla de Joaquim Oristrell o de Cristian Drut en Argentina. En televisión ha participado en “Cuéntame”, “Mitos y leyendas”, “El Katarsis”. Su última intervención fue en la película “Maricón Canela” con personaje principal. Ha sido galardonado dos veces como mejor actor en el Festival Canarias Rueda.
Pregunta: ¿Cómo se encuentra a pesar de la situación que estamos viviendo?
Respuesta: La verdad que bien, ahora parece que se ha reactivado todo un poco y empiezan a salir proyectos, más trabajo. Y viendo un poco la luz, después de tanto tiempo viendo las sombras.
P: ¿Cómo fueron los meses de confinamiento?
R: Pues los dos primeros meses la verdad es que fueron bastante creativos, hice dos cortos aquí en casa con un móvil y salieron cuatro cositas curiosas, para pasar el rato y distraernos. Había tanto tiempo libre que empecé a editarlos, grabarlos para pasar el tiempo, y los primeros meses bien, luego empezó la cosa a decaer (risas).
P: ¿Cómo se describiría?
R: Un chico alegre con su. Parte también depresiva, pero que no paro de intentar hacer cosas. Escribo, tengo un par de libros publicados, y dirijo también. Entonces entre la actuación, la dirección y la escritura me manejo y soy una persona alegre, amigo de mis amigos, todo lo que se suele decir. Pero que no intente mirar atrás, ni parar, porque si miras para atrás es complicado.
P: ¿Empezó sus estudios a los 25 años, a qué se debe?
R: Una cosa muy curiosa, se murió un amigo mío que estaba vinculado al teatro y no sé porqué sentí que muchas cosas de él vinieron a mí. Y fue la decisión de empezar a probar, me gustó, dejé el trabajo en el que estaba, soy de Barcelona, me vine a Madrid, empecé a estudiar y no paré. Fue algo espiritual.
P: ¿Se acuerda del primer trabajo que hizo?
R: Sí, fue mientras estaba en “El colegi del Teatre” y fue una actuación con Leo Bassi, tuve que mentir a todo el teatro haciendo que me hipnotizaba y me tiraba una tarta a la cara. Ahí me di cuenta de toda la mentira que hay ahí.
P: ¿Cuál es el proceso que hace para preparar el personaje?
R: Primero analizar el guión, qué es lo que quieren decir, subtexto, y luego interiorizar mucho lo que puedes aportar de ti. Buscar siempre la parte tuya de lo que tiene el personaje, dentro de las circunstancias dadas en el texto.
P: ¿Hay alguno que le haya marcado especialmente?
R: Sí, hubo uno que me ha marcado, una obra de teatro que escribí dirigió Luifer Rodríguez, y lo conocí en el Festivalito de la Palma. Él presentaba la gala de premios, y me dieron el premio a mejor actor y a partir de ahí nos conocimos. Esta obra habla sobre la memoria histórica y la verdad es que me marcó bastante porque es un monólogo de un tío que está enterrado en una fosa común y no lo sabe, se piensa que está en una cárcel. Está en un bucle temporal hasta que descubre que está muerto, conoce a una mujer y hablando con ella lo descubre. Y esta obra fue una que me tocó bastante, y un trabajo muy bonito desde la humildad, no habla de quién son los vencidos ni los ganadores, solo la gente que sufrió daños colaterales.
P: ¿Qué nos puede contar sobre “La habitación 42”?
R: En realidad es sobre mi abuelo que me contaba las historias sobre la Segunda Guerra Civil, le faltaba una pierna por la guerra, estuvo exiliado en Francia, me contó muchas cosas y se lo debía a él. Uno de los personajes del que yo hablo es mi abuelo, y la verdad que había algo muy de corazón con lo que estaba contando, tiene un por qué.
P: ¿En especial, le gustaría participar en una obra de teatro o de cine?
R: Me gusta interpretar todos los personajes que están al límite, no me gustan los personajes planos. Que tengan chicha y poder jugarlos al límite, cualquiera de ellos que se identifique con lo real, que pasa hoy. Al final el teatro es el reflejo de la vida, siempre lo ha sido y siempre lo será. Un reflejo de la sociedad, lo que os pasa en el momento, comparaciones pasado, presente.
P: ¿Tiene algún actor/actriz que tenga como referente y con el que le gustaría tomar un café?
R: Muchos, español me he tomado algún café con algunos. Con quién me gustaría hacer una obra de teatro es con Luifer Rodríguez, que ya lo he hecho, pero tengo muchas ganas de volver a subirme con él al teatro y volver a tomar un café en el escenario.
P: ¿Cambia mucho la percepción de trabajo en Argentina?
R: En Argentina tienen grandes maestros, y tienen una manera de trabajar muy de verdad. Son muy psicoanalistas, el enfoque al trabajo viene mucho de ahí, analizar el personaje, pero tienen un punto más de dentro a fuera. Y sobre todo, hay muchísimo teatro, cuando fui creo que había 250 espectáculos en cartel, era una barbaridad.
P: ¿A la hora de actuar tiene alguna manía?
R: La verdad es que no, en ese aspecto no soy maniático.
P: Cuando termina un trabajo, ¿cómo afronta la sensación de vacío?
R: Siempre hay un par o tres de días de desinfle, sobre todo si has terminado un proyecto y has terminado bien. Pero es un vacío muy gordo, hasta que tu cabeza empieza a retomar o tienes otros proyectos, es raro porque en nuestro mundo no tenemos algo al que agarrarnos diariamente, cada día son pruebas que te van poniendo e intentando trabajar. Escribo, dirijo, cuando no me llaman, intento hacer mis cosas, y es como reiniciar.
P: ¿Se hubiera imaginado que se hubiera involucrado en todos los proyectos en los que ha estado?
R: La verdad es que no, era un poco raro, ya que yo no había tenido nada a ver con todo esto. Empezar a dejar el trabajo, toda la gente que me rodeaba, menos mis padres, me decían que hacía. Y al principio fue un poco complicado, porque no encontraba mi sitio, ya tenía mi vida hecha. Luego con el tiempo dije, dios todo lo que he logrado.
P: ¿Cuál es su mayor ambición?
R: Sinceramente, hoy en día no es ser famoso, sino tener trabajo. Al final lo que quiero es trabajar, nada más. Seguir aprendiendo y creciendo, porque cuando no trabajas, más en este mundo, no estamos acostumbrados a tener un trabajo fijo, y cuando no tienes nada tienes que buscar otras cosas, sabiendo que podrías estar actuando.
P: ¿Qué obra cree que tendría que ser obligatoria para todo el mundo?
R: Te voy a decir una película que no va a ser la típica, cuando la vi me quedé asombrado. “Cadena perpetua”, me parece que es una película muy humana todo lo que es una cosa social, muy bonita, que me cautivó.
P: ¿Dónde vamos a poder verle próximamente?
R: Ahora estoy con una obra de teatro que se llama “Pícaros” de Borja Rodríguez y vamos a empezar a ensayar a partir la semana que viene, la productora es Mic producciones y ya tenemos un montón de bolos de gira. Es una obra hecha con una dramaturgia de textos clásicos y ha hecho una mezcla sobre los pícaros, los marginados de hoy en día, el que no tuvo oportunidades de pequeño y se tuvo que buscarla vida y empezar a delinquir. Y la verdad que con muchas ganas de empezar con los ensayos y empezamos a partir del lunes que viene, luego de gira y contento de tener trabajo.