Hoy en Vavel Televisión hemos podido entrevistar a la actriz Nathalia Paolini. Es una actriz y directora latina, su último proyecto es una obra teatral titulada “Villa dolorosa”, hasta febrero actuaron en teatros Luchana. Además, estos próximos meses participará en el largometraje “Small red parrots” de Raquel Menor, se encuentra en pre-producción.
Pregunta: ¿Tenía algún proyecto previo a la declaración del Estado de Alarma? ¿Cómo ha trastocado la Co-Vid19 a sus planes profesionales?
Respuesta: En diciembre habíamos estrenado una obra que dirigí y actué, éramos seis personajes. La obra se titulaba “Villa dolorosa o tres cumpleaños fracasados”. Hice la versión de una dramaturga alemana. Hicimos la obra hasta febrero, ese mismo mes empecé a buscar una sala y ahí quedó. No quiere decir que no vaya a retomarlo posteriormente. Precisamente ese sentimiento de bajarse de una sala y subir a otra es lo que le da vida a un proyecto, y más cuando está recién estrenado. Se encuentra en stand by, se que se están haciendo cosas en Madrid, que los teatros están abiertos. La verdad es que no me he movido para buscar viendo lo que va a suceder, simplemente porque somos muchos en escena, el aforo reducido, la incertidumbre, volver a ensayar... no queremos retomar algo sin saber que pasará. Estoy esperando a ver lo que pasa.
P: ¿Cómo se definiría con tres palabras?
R: Pues me definiría como una mujer de mente inquieta. Trabajo mucho por las cosas que quiero conseguir, marco los objetivos y voy a por ello. Tengo un abanico de posibilidades que a veces puede llevar a la dispersión pero es una necesidad de abrir posibilidades, vivir experiencias y saber como gestionar.
P: ¿Recuerda la primera vez en la que se subió a un escenario?
R: Por supuesto, eso nunca se olvida. La sensación que tengo de ese día es precisamente cuando se abre el telón y entra este frio del público hacia el escenario. Te pone los pelos de punta. Tenía 17 años cuando hice mi primera obra en Venezuela. Era una obra de literatura venezolana, fue una adaptación de una obra gallega. Hice de doña Barbara cuando era joven, su historia es muy dura. Tiene muchas alegorías históricas, sociales y políticas.
P: ¿Tiene algún referente?
R: Pues moderno me gusta mucho Emma Thompson, la acabo de ver ahora en “Years and Years” y me ha confirmado que me gusta mucho. Andie McDowell, me encanta. Son actrices que tienen una fuerza increíble, tienen una energía única. La energía de ambas que son maduras son muy puestas y firmes, eso me gusta mucho de ellas. Son muy orgánicas también, eso no les hace perder la esencia que tienen. Son unas actrices a las que admiro muchísimo.
P: Dentro de 5 años, ¿cómo se ve?
R: Yo llegue a la conclusión de que no voy a pensar en eso. Los últimos años he aprendido que las cosas cambian demasiado rápido, es lógico y hay un ideal a seguir que te lo puedes marcar. La flexibilidad para cruzar el camino del arte es primordial. A veces está bien marcar un objetivo, pero tienes que ver la flexibilidad que tienen, pueden que las condiciones no estén dadas. La vida te trae nuevas experiencias que no has buscado, te pueden aportar muchísimo. Quiero seguir estudiando, escribiendo, aprendiendo, dirigiendo... Sobre todo quiero tener la oportunidad de seguir dedicándome a esto y evidentemente que sea mucho más seguro. El camino del artista es un poco así.
P: ¿Cómo cambia un rodaje pre-COVID respecto a uno actualmente?
R: No he hecho nada audiovisual todavía. Yo creo que la diferencia podría ser quizás en como lo vive cada uno. Sé que hay compañeras que se sienten mucho más tranquilas pero quizás hay otras que no. Entonces creo que sí cambia, pero en la función de la importancia que le demos a este factor que existe. No debería ensuciar ni hacer ruido en el rodaje. Una vez que todo esté seguro, es como un filtro, tienes que olvidarte de eso y disfrutar del momento. Está demasiado presente, es porque estamos las 24 horas escuchando noticias sobre ello. Toma las medidas y una vez que te sientas segura déjalo, no traslades el problema. Tienes que disfrutar del trabajo.
P: ¿Podría adelantarnos algo del largometraje “Small red parrot”?
R: Es un largometraje que está en pre-producción, es de Raquel Menor. Estamos en ello, ya tengo el texto y el guión, me parece maravilloso. Es un proyecto en el que estoy encantada de estar, ha sido muy inesperado. Tienes que estar abierto a recibir las cosas que llegan, no sabes por donde va a saltar la liebre. Estoy feliz de trabajar con Raquel, es una mujer increíble, tiene una energía que me encanta. Tengo la plena confianza de que va a ser así. Es una película española.
P: ¿La obra “Villa dolorosa” es la que tuvo que frenar?
R: Sí, nos quedamos una temporada en teatros en febrero. La búsqueda la paré ya que esto llegó demasiado pronto. Antes de que todo el mundo entrara en cuarentena, yo entré en cuarentena. Estuve con unos amigos, uno de ellos se sentía mal y dio positivo. Es una obra que le tenía muchas ganas, la versión de las seis hermanas. Aunque no hayamos podido continuarla este año, estoy muy contenta de estar en ella, formamos un equipo increíble. Es un proyecto que puede tener larga vida.
P: ¿Cree que el teatro le aporta cosas diferentes respecto a otros géneros?
R: El teatro es mi escuela, es lo que más hecho en mi vida. No importa por donde inicies, probablemente inicies por audiovisual pero tienes que hacer teatro. Eso es lo que te da como la base, construyes un edificio. El teatro te da la posibilidad de investigar lo que puedes realizar posteriormente. Para la gente que hemos hecho mucho teatro y queremos pasar al mundo audiovisual nos supone también mucha práctica. Tener la base, la escuela que te da el teatro donde trabajar cuerpo, voz... tiene que ser una comunicación fluida y constante. Para mi un actor o actriz tiene que hacer de todo, tocar todos los mundos. Tiene que hacer un fluir constante. Incluso que ahora que está todo muy democratizado puedes jugar, hacer cosas en casa.
P: ¿Tiene alguna anécdota de sus años de interpretación?
R: Han habido muchas. Podría mencionar a un festival al que fui todavía estando en Caracas. Es un festival muy particular. Nosotros teníamos la obra en castellano, éramos tres personajes en escena y había una traductora para los tres. Era muy loco, ella iba traduciendo todo a la vez. Hablábamos muy rápido, era mucho diálogo y muy dinámico, era un texto de teatro contemporáneo. Esto me pareció bastante curioso. Luego nos fuimos a otro lugar de Bielorrusia para estudiantes de español, la hicimos totalmente español, no sé si entendieron mucho. Puedes percibir el teatro como algo vivo, te llega, no tienes porque entender el idioma.
P: ¿Qué consejos le daría a alguien que quiera dedicarse a esto?
R: Mucha paciencia. De hecho, a parte de ser actriz soy socia de Javier, llevo toda la parte de publicidad de actrices y actores. Siempre que puedo, sobre todo a la gente que quiere incorporarse les pido paciencia y trabajo constante. Esa es la clave. Si hay desesperación por querer llegar te vas a frustrar. No es una carrera en la que llegues ya, creo que nunca llegas. Probablemente logres algo o tengas momentos estupendos, pero no creo que si le preguntas a algún actor o actriz te va a decir que ya llegó. Tienes que tener mucha paciencia, trabajo, constancia y preparación.
P: Una vez recibe el guión ¿cómo conecta con el personaje?
R: Yo recibo el guión, lo leo y lo dejo ahí un rato. Después lo vuelvo a coger, lo leo, y lo dejo un par de días más. Conocer a un personaje que vas a interpretar es lo mismo que cuando conoces a alguien. Tienes que ir dando espacio mutuo, os vais conociendo, vemos las cosas que podemos compartir. Yo no estudio, no hago eso. Leo y leo, de tanto leer me va quedando esas frases y palabras. Las aplico a mi vida. Siempre a mis alumnas cuando doy clases de interpretación les digo que utilicen el texto formando parte de ellas. Tienes que emparejar al personaje con tu vida, como actúa con los demás... eres una esponja que absorbe poco a poco lo que te va diciendo este personaje. Tienes que saber conectar con el personaje, sin asumir la parte técnica.
