“Crónica de una Tormenta” retoma la retórica de la corrupción del poder desde el terreno periodístico, pero no como otros títulos nos tenían acostumbrados sino desde el terreno psicológico de un guion muy bien estructurado. Protagonizada por dos grandes personajes del mundo del espectáculo, Clara Lago y Ernesto Alterio, la cinta nos pone en la tesitura de un director de un periódico que debe elegir a quién delegar su cargo, a su ayudante modelo o al práctico ejecutivo sin escrúpulos.
Inaugurada en el Festival de Málaga, la película llegará a los cines el 23 de octubre donde se espera una buena acogida. Sus orígenes se encuentran en una obra teatral llamada “Testosterona” que la directora, Mariana Barassi, fue a ver a recomendación de su productor, Gerardo Herrero. La impronta teatral se deja ver en el alto ritmo de los intercambios en las conversaciones entre los protagonistas, las largas escenas y la continuidad temporal en un mismo espacio de rodaje. Al final todo este conjunto carga de un gran peso interpretativo a los personajes que destacan por una brillante actuación llena de matices y diferentes facetas. Es sorprendente la fluidez con la que los actores se desenvuelven ante los giros de guion así como la naturalidad en las expresiones y en la exteriorización de sus sentimientos. Casi como si se tratara de una conversación real es difícil predecir con seguridad el desarrollo de los acontecimientos. De hecho, la propia película en su conjunto se abre a distintas interpretaciones surgidas de personajes psicológicamente complejos.
En este sentido, Ernesto Alterio ha calificado la cinta como una experiencia que le ha hecho crecer como intérprete. “Es todo un reto porque rodamos escenas muy largas, de hasta 18 minutos”, ha agregado el actor argentino en declaraciones a la prensa.
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Por su parte, la deontología periodística y las noticias falsas son sólo el telón de fondo de una historia que gira en torno al mismo tema: la controversia entre lo moralmente correcto y la ambición por el poder. Sin embargo, su final es un tanto abrupto, y no llega a posicionarse claramente en ninguno de los dos lados de la balanza. Si bien a su favor hay que destacar el notable montaje de la película, que sabe aportar el ritmo adecuado en cada momento para que la tensión dramática se mantenga y se acelere en los momentos precisos.
En definitiva, “Crónica de una Tormenta” es una película interesante sobre los entresijos del poder desde el punto de vista íntimo de dos personajes que se debaten en el terreno de lo ético. Tan realista como ficcional deja a cada uno su propia apreciación sobre los límites en la obtención de la tan ansiada supremacía.
