La pandemia ha paralizado la industria cinematográfica y con el paso de las semanas ha medida del aumento de contagios y del número de países con medidas de confinamiento, el cine ha ido de forma paralela retrasando y cancelando estrenos y paralizando rodajes.
Con un escenario aún incierto, el circuito de festivales que tenía que comenzar este mes de Mayo con el Festival de Cannes a la cabeza se ha tenido que reinventar. Para empezar el certamen de cine francés ha decidido retrasar sin fecha prevista la celebración aunque ha habilitado finales del mes de junio para celebrar el mercado entre productores y distribuidoras de manera digital.
La organización de Cannes junto a la de otros festivales como Venecia y San Sebastián se han unido en We are one, un evento digital y accesible a todo el mundo a través de YouTube donde se programara películas actuales o que han pasado a lo largo de la historia de dichos eventos cinematográficos.
Esto no quiere decir que no se celebren de forma presencial más adelante, por ejemplo el Festival de Venecia previsto para el mes de septiembre sigue manteniendose en las fechas previstas esperando un escenario diferente al actual con respecto al coronavirus.
Pero sin duda el cambio más importante ha llegado en la Academia de Cine de Hollywood. En los Oscars de este año, podrán competir películas que se estrenen en plataformas, es decir no obliga a las cintas a ser estrenadas en salas. Esta medida de carácter excepcional abre más aún el debate entre las empresas de exhibición y plataformas como Netflix.
Mientras tanto en nuestro país no sabemos si se producirá una medida similar en los Premios Goya y el Festival de Cine de Sevilla mantiene su celebración en el mes de noviembre.
Por último destacar que si las previsiones del gobierno se cumple a partir del 25 de mayo podrán abrir los cines con hasta un 30% de su capacidad y con butaca preasignada. Aún queda por saber como se reajustara el calendario de estrenos a tales circunstancias.