El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente de la oposición, Pablo Casado, se reunieron a principios de la semana para llegar a algún acuerdo y poder afrontar la crisis provocada por la pandemia de COVID-19. Después de varias semanas de tensión entre el Gobierno y el partido de la oposición, Casado propuso la creación de una comisión parlamentaria la cual fue aceptada, aunque todavía no se han acordado con detalle las medidas que se llevarán a cabo.
En primer lugar, Sánchez ya tenía preparada una mesa de reconstrucción que podría haber empezado a funcionar este mismo martes. Consistía en establecer cuatro grupos de trabajo divididos en: reactivación económica, Estado de bienestar, sanidad y salud pública, y Europa.
Sin embargo, el líder popular pedía cambiar esa mesa por la comisión finalmente creada, ya que de esta forma la oposición podría tener más control. Y así ha sido. Pues, para el Ejecutivo lo más importante era los acuerdos que se podían alcanzar, antes que el formato. “Lo importante es que haya un acuerdo. Lo de menos es el formato, no importa si es una mesa o una comisión parlamentaria. Lo importante es que estemos todos, desde el Gobierno se valora positivamente que se incorpore el principal partido de la oposición”, reafirmaba María Jesús Montero.
Por otra parte, el Congreso será el que decida todos los detalles de esta comisión parlamentaria, tanto los comparecientes como el formato. Aunque, ayer miércoles 22, Casado presentó la iniciativa de llevar el la presidencia de la comisión junto a un análisis de las medidas adoptadas desde que se decretó el estado de alarma y las medidas a adoptar para revertir las consecuencias de la crisis del coronavirus. Pero el PSOE denegó hacerse del cargo de esta comisión.
Además, pedía a Sánchez el incremento de material de protección para todos los sanitarios y trabajadores de las actividades esenciales; test masivos para toda España, ayudas económicas inmediatas para autónomas, pymes y trabajadores afectados por los ERTE, entre otros. “El objetivo que todos compartimos es acelerar la recuperación de la normalidad”, afirmaba el líder del PP.
El Gobierno ya está en marcha para reinventar dentro de unos límites el trabajo parlamentario tras la confirmación de la creación de la Comisión, aunque ahora el Ejecutivo tendrá menos protagonismo.
