El pasado jueves, el Parlamento Europeo se volvía a reunir para debatir sobre los eurobonos (títulos teóricos de deuda pública, a emitir por el conjunto de todos los países de la zona euro) para lograr la reactivación de la economía debido a que la mayoría de países miembros tienen a todos sus ciudadanos confinados para evitar una mayor propagación del virus.
Todo esto se debe a la crisis sanitaria provocada por la pandemia del coronavirus que tuvo su origen en Wuhan (en China), de ahí llegó a Europa, concretamente, a Italia, que tiene a todos sus ciudadanos confinados desde el pasado 9 de marzo tras el aumento de los contagios.
Poco a poco el virus se fue extendiendo hasta ser declarado por la OMS como una pandemia. Entre los países más afectados en la Unión Europea destacamos: Francia (desde el 17 de marzo en confinamiento), Reino Unido (23 de marzo), Portugal (18 de marzo), Austria (16 de marzo), Bélgica (18 de marzo), España (14 de marzo).
Todo esto ha provocado que la economía se resienta y es por ello que los diferentes países exigen medidas económicas acorde con la situación excepcional en la que estamos viviendo.
En esa reunión, el Parlamento rechazó pedir expresamente eurobonos o una mutualización substancial de la deuda para financiar la recuperación económica, con sólo 44 votos de diferencia (282 a favor y 326 en contra).
En el texto de dicho encuentro se menciona que “se considera esencial que, con el fin de preservar la cohesión de la Unión Europea y la integridad de su unión monetaria, se mutualice a escala de la Unión una parte sustancial de la deuda que se emita para combatir las consecuencias de la crisis de la Covid-19”.
A modo de cierre hay que mencionar unas palabras de Ursula Von der Leyen en las que reconoce que “es cierto que nadie estaba preparado para esto. Pero también es cierto que muchos no llegaron a tiempo cuando Italia necesitaba ayuda al principio de todo esto. Y lo correcto es que Europa en su conjunto ofrezca una sentida disculpa”.
El Parlamento Europeo continuará hoy con las reuniones para formalizar algunas de las propuestas que consiga redirigir fondos europeos a la lucha contra el coronavirus, aunque queda prácticamente descartada la ayuda a gran escala.