Desde Sherlock Holmes hasta Agatha Christie, las novelas de misterios han copado el imaginario colectivo, siendo muchas de sus obras adaptadas al cine, ya que Holmes es el personaje de ficción con más películas a sus espaldas. La fórmula de un crimen con multitud de sospechosos no es nada nueva, hay cientos de ejemplos como la reciente Asesinato en el Orient Express (que tuvo otra versión en 1974 con otro reparto estelar), la divertida Un cadáver a los postres (1976), o Gosford Park (2001).
Esta fórmula que ha sido parodiada, tomada en serio y dada la vuelta mil veces, vuelve a sorprender con un guión fresco y sensacional escrito por Rian Johnson, que también es director de la cinta (Star Wars: Los últimos Jedi o Looper). La historia, en este caso, gira en torno al aparente suicidio del famoso escritor Harlan Thrombey, tras una fiesta familiar. El detective Benoit Blanc investigará a los familiares del fallecido para descubrir la verdad. A partir de esta premisa, se da una historia llena de giros, sorpresas y guiños a las historias clásicas que no dejará indiferente al espectador, aunque algún que otro giro pueda resultar predecible.
Un reparto de lujo
Una de las grandes bazas de la película es su reparto lleno de estrellas. Daniel Craig (James Bond) encarna al detective Blanc, y ofrece una interpretación simpática y un tanto paródica de los clásicos detectives. La otra gran protagonista de la cinta es Ana de Armas (Blade Runner 2049), que encarna a Marta Cabrera, la enfermera inmigrante del fallecido, con un papel bondadoso y que soporta gran parte del subtexto de la película.
Christopher Plummer (Beginners) se convierte en el fallecido Harlan Thrombey. Jamie Lee Curtis (La noche de Halloween) como Linda Drysdale, como una de las hijas del fallecido, casada con Morris Bristow, interpretado por Don Johnson (Django Desencadenado). Chris Evans (Vengadores) encarna al hijo de la pareja, cuyo personaje algo arrogante, sin duda, será uno de los más recordados.
En otra rama familiar se ubica Michael Shannon (La Forma del Agua), como otro de los hijos de Harlan y Toni Collette (Hereditary) como nuera viuda. Completan el reparto Katherine Langford (Por 13 razones), Jaeden Martell (It) como nietos de la víctima, y por parte de la policía Lakeith Stanfield (Atlanta).
Este reparto estelar cumple con su misión y otorga un toque especial a cada uno de sus personajes, consiguiendo enganchar aún más a los espectadores a la truculenta historia.
Un subtexto actual
Si algo diferencia Puñales por la Espalda de otras historias del mismo género, es su subtexto. A pesar de que cumple todos los requisitos para ser una historia típica y plana, el guión cuenta con un background y unos guiños al clima político actual.
Esto se ve claro en el trato de esta familia adinerada al personaje de Marta Cabrera (Ana de Armas), al ser inmigrante con una situación familiar delicada. El personaje se enfrentará a los prejuicios e incluso a la xenofobia que representa la América de Trump. Junto a esto, el contraste de los nietos de Harlan, que encarnan la nueva extrema derecha (seguidora de Trump y neoliberal), y la nueva oleada progresista.
Junto a este mensaje de crítica a la hipócrita sociedad americana blanca, se une un mensaje a favor de la bondad y del buen corazón, sin entrar en spoilers, el mensaje quiere dejar claro la resolución del caso y dejar al espectador con una reconfortante sensación.
Todo este subtexto es tratado con humor y situaciones a veces algo forzadas, pero que funcionan e incluso pueden llegar a recordar a escenas familiares de la propia familia, ahora que se acercan las cenas navideñas y sus cuñados.
Antes de acabar, es de alabar que una película destinada a un público adulto y siendo una historia original (sin estar basada en cómics), se haya convertido en un éxito de crítica y público, abriendo la puerta a que las compañías sigan apostando por un cine alejado de los grandes taquillazos y logren enganchar a nuevos espectadores.
Sin duda, es una de las cintas más divertidas y entretenidas de 2019, un año que está dejando una filmografía espectacular y memorable.
Nota: 8/10.
Lo mejor: el reparto y el subtexto, que otorga frescura al guión.
Lo peor: el ritmo algo estancado del inicio y la previsibilidad de algún que otro giro de guión.
