Sus créditos de colores, bellos, ordenados e imaginativos. Nuestro cine, la música folclórica, las historias. David Trueba, el primero de todos en hablar sobre el inicio del cine en nuestro país: "Segundo de chomón, El Hotel Eléctrico (un genio, una máquina de inventar), un asesinato y un entierro, el de don José Canalejas", recuerdan juntos, y a Pepe Isbert y la denominada "escuela del crimen", así se llamaba desde 1910 al acto de hacer cine en España.
Los hermanos Baños, los encargos de películas porno, la posguerra y el franquismo, el inicio del doblaje de películas, Luis García Berlanga, el precursor del cine español, los actores españoles y las películas de monjas, Irene Alba, los hermanos Guitérrez Caba, la amistad entre un rojo y un falangista, la que había entre Luis Buñuel y José Luis Sáenz de Heredia, el origen de Chapalo Film (Pichapalo, así llamaban a uno de los hermanos), y Franco.
La dictadura y la censura sobre los fotogramas que empezaban a emerger en las cintas sobre la vida en las regiones, los que escribían y dictaban sobre las películas, al tiempo que apoyaban e interpretaban en ellas, sí, el dictador también era un apasionado del séptimo arte (el que él quería ver y escuchar, claro), pues tuvo anécdotas e influencias varias en el cut final de "Raza" (como en tantas otras), y en "La Malcasada", donde hasta compartió escenas con Millán- Astray.
"El Ruiseñor de las Cumbres" y Joselito. Las temáticas presentes en la época. El cine basado en niños huérfanos. Trueba, el mayor, dice que sus primeras pesadillas procedían de sus primeras películas. Loles León, que iba al cine desde los tres años, iba con su padre a cantar y bailar a los bares "Nunca pasa nada, de Juan Antonio Bardem", nombran; también la suerte de la amistad, las cosas del cine. Verónica Forqué, que tenía a Marisol como ídolo de pequeña, recuerda "Un rayo de luz". José Coronado también lo estaba, al igual que ella, enamorado de Marisol.
Blancanieves como inspiración. "Novio a la vista", de Berlanga y una bella tarde en la vida de Colomo. "La venganza del corsario", "Corre corre Caballito", Rafael Azcona, joven aspirante a poeta... y Berlanga, que lo contactó en los 60', comenzando así su segunda etapa en el cine.
Su capacidad dirigiendo, el grado de virtuosismo haciendo cine. La capacidad para montar un plano. "Los 400 golpes", un film de la época, del 1959, que tuvo un efecto tremendo en la motivación de muchos cineastas. También Ana Belén, cantando con nariz de payaso con solo 13 años en su debut en la gran pantalla.
Luis Lucia, un ser "tiránico, grosero, prepotente y aprovechado de los débiles", cuentan. "Me cago en el padre de los hermanos Lumière", esa frase. Nació de Luis Lucia, pero al parecer se apropió de ella Fernando Fernán Gómez. Cerezo estudiando y en sus inicios como meritorio. Boyero frente a la emoción de los primeros descubrimientos: "El mundo sigue", de Fernán Gómez es una obra de arte, da mucho miedo. Retrata a gente buena y encantadora, pero enferma y sórdida, de "3ª categoría", de esas que los exhibidores no quieren mostrar.
"La censura de Viridiana", de Buñuel. Su final distinto, el trío del Mousse, fruto de la censura. La llegada de Elías Querejeta en los 60' para hacer otras películas, ir a Cannes y lograr ir a Berlín y ganar, algo que nadie podía hacer. "La caza", de Carlos Saura, Oso de plata en Berlín. Tan complicada de grabar por las condiciones atmosféricas. "La caza del conejo", y su cambio por la censura a "La caza", quizá un acierto aquí para muchos.
Emoción, protagonistas y cine abierto al debate y la anécdota en una película documental guiada por Don Antonio Resines, una velada agradable y abierta a descubrir; a aprender sobre creadores y la visión de un mundo de sueños, de historias, rodajes y voluntades con una meta única: aprender de nuestra historia, repasar, estudiar y compartir juntos el cine.
