Como si de la vuelta del hijo pródigo se tratara, Marvel y Sony han alcanzado un acuerdo para que Spider-Man se reincorpore al universo cinematográfico de Marvel. Tras una etapa en la que el entendimiento entre ambas partes parecía imposible, el problema parece haberse solucionado por arte de magia. La ruptura, que se produjo a causa de desacuerdos en el reparto de beneficios, ha quedado atrás, y las dos empresas han acordado el lanzamiento de una nueva cinta del personaje en el año 2021.
Al margen de lo impactante que resulta la reconciliación, cabe analizar los beneficios de la vuelta de Spider-Man al universo de los vengadores. Por una parte queda claro que la permanencia del héroe arácnido en el universo supone una nueva ola de ilusión para los fans de las cintas de Marvel, fans que habían quedado muy disgustados con la salida del héroe. Con su regreso no solo se logra traer de vuelta a una de las caras de la franquicia, sino que también se vuelve a conectar con un importante sector del público que a largo plazo habría supuesto una gran pérdida de audiencia.
En un plano más interno cabe destacar que, para el personaje, la reconciliación supone casi su salvación, pues en manos de Sony parecía adentrarse en un proyecto de dudoso futuro. A estas alturas no es duda para nadie que la gestión en solitario de Sony con Spider-Man ha ido de más a menos, lo cual ha dejado demostrado que a pesar de que las intenciones de la empresa son buenas, la ejecución del personaje ha traído fallos y en ocasiones resultados desastrosos. Es por ello que su reintegración al elenco de los vengadores trae consigo un aire de esperanza al saber que se va a continuar una saga que hasta el momento ha tenido una aceptación tremenda.
Lo que queda claro es que del mismo modo en que se hablaba que ambas partes salían perjudicadas de la separación, ahora son también ambas partes las que se ven favorecidas por un problema que en términos simples, jamás debió de haber existido.