La salida de Spiderman del Universo cinematográfico de Marvel es algo de lo que se ha hablado mucho en tiempo reciente. Según las informaciones, la ruptura entre Sony y Marvel se ha producido en base a desacuerdos en cuestiones financieras, como también, falta de entendimiento en el apartado creativo, sin embargo, a pesar de la gran cantidad de información que circula por la red, pocos han sido los que han hablado a cerca de quien es el más damnificado de esta ruptura.
Para llegar a una conclusión se debe analizar el caso desde varias posiciones, identificando como la separación afecta a cada una de ellas. Por parte de Sony, la separación supone perder un apoyo importante en cuanto a exposición, pues aunque la figura de Spiderman sea muy famosa de por sí, el estar vinculada a la compañía responsable del éxito de los vengadores hacía que el público adquiriera un renovado interés por el personaje, un interés que había generado dudas con sus anteriores cintas, pero que se había visto multiplicado con su inclusión en los vengadores. Ahora y con una nueva andadura en solitario resulta complicado saber qué manejo tendrá el arácnido, sobre todo si tenemos en cuenta que los resultados anteriores a la unión con Marvel no fueron muy alentadores.
Por otra parte, sería una mentira no mencionar que Marvel Studios también sufre una gran pérdida con la marcha de Spiderman, ya que no era secreto para nadie que el trepamuros iba a ser una de los grandes protagonistas de la nueva era de Marvel, con la ausencia de personajes como Iron Man o Capitán América estaba claro que Marvel pretendía convertir a Spiderman en una de las caras más importantes de su proyecto. La ruptura con Sony obliga de alguna manera a Marvel a reordenar sus ideas y reestructurar una saga que ya no podrá contar uno de los héroes más populares del panorama actual.
Con todo lo dicho queda claro que ambas compañías pierden por igual, tanto Sony como Marvel se han dejado llevar en una guerra innecesaria que lo único que deja es incertidumbre para un personaje que estaba funcionando de maravilla, y que ahora ve condicionado su futuro por una guerra absurda. Por lo tanto el gran perdedor no es Sony, no es Marvel ; es Spiderman un personaje que termina siendo víctima de la codicia de estas dos empresas.
