El 'brexit' hace referencia al proceso de salida del Reino Unido de la Unión Europea, según decidieron los ciudadanos británicos en referéndum en junio del 2016.
Hace tres años comenzaba la consulta que ha provocado un debilitamiento del sistema político, de la economía y del tejido social del país. El 'brexit' que les vendieron a los británicos era simplemente imposible, se trataba de un fraude.
La crisis política ha fracturado a conservadores y laboristas (formaciones tradicionales. El Parlamento se halla exhausto con debates y votaciones sobre el 'brexit' que han terminado con Theresa May (no estaba preparada para tan ardua tarea).
En el Partido Conservador, los ultras han creado y viven en un universo paralelo. a día de hoy se ha convertido en un partido de extremistas. Su principal objetivo es liquidar el 'brexit' a toda costa, sean cuales sean las consecuencias, para evitar la fuga de votantes.
La incertidumbre del 'brexit' ha reavivado el debate sobre la independencia de Escocia y la frontera en Irlanda pone en peligro el futuro de la provincia en el norte de la isla. Actualmente la economía británica es un 2% menor de lo que hubiera sido de optar el país por permanecer en la UE. El Banco de Inglaterra advierte que una salida sin acuerdo y sin período de transición puede ser peor que la crisis financiera del 2008.
Jeremy Corbyn, el líder del partido laborista, declaraba recientemente que “sea quien sea el nuevo primer ministro, deberá someter a la consulta ciudadana a sus planes para el 'Brexit', ya sea salir de la UE sin acuerdo o con un acuerdo diferente. En esas circunstancias, quiero que quede claro que el Partido Laborista hará campaña a favor de la permanencia en la Unión Europea, frente a la opción de un 'Brexit' sin acuerdo o frente a cualquier acuerdo que suponga una merma en la protección de la economía y de los empleos”.
Corbyn ha tenido que abandonar su postura de ambigüedad con respecto a este tema debido a la amenaza de que Boris Johnson sea primer ministro, la presión interna y los malos augurios electorales. El aboga por la permanencia en la UE en un hipotético nuevo referéndum.
Las principales consecuencias del 'Brexit' para la Unión Europea son la ruptura del equilibrio de fuerzas existentes actualmente en la Unión, pérdida de la visión transatlántica de la UE, debilitamiento del mercado único europeo y su peso relativo en la economía mundial. También constituiría un mal precedente (corriente de opinión contraria a la UE).
Este proceso también afecta a España, debido a que ambos países mantienen unas importantes relaciones económicas. Alrededor del 7% de nuestras exportaciones totales de bienes y servicios tienen como destino el Reino Unido.
La salida británica del Mercado Único implica la necesidad de negociar un nuevo acuerdo comercial, posiblemente con aranceles, lo que encarecería nuestros productos allí. Por lo tanto, lo más probable es que vendamos menos productos españoles en Reino Unido.
Reino Unido es el principal origen de nuestro turismo. La depreciación de la libra encarecerá las vacaciones en España de los británicos, al margen de que puedan surgir dificultades a la libre movilidad de las personas.
También hay que mencionar que unos 300.000 británicos tienen residencia permanente en España y otro medio millón reside parte del año. En sentido contrario, el Reino Unido es el primer destino para la emigración española. Ambas comunidades de emigrantes se verán perjudicadas.
La inversión neta acumulada por los grupos españoles en Reino Unido asciende a unos 50.000 millones de euros. La resultante depreciación de la libra reducirá los beneficios en euros de las filiales británicas de las empresas españolas.
Ya hace tres años que empezó este proceso que está asumiendo al Reino Unido en un ambiente de inestabilidad y de incertidumbre, y cuya solución no parece que vaya a ser inminente.
