Crítica de Men In Black: Internacional
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La franquicia prácticamente había muerto después de la poca recaudación que tuvo la tercera entrega del 2012. Sin embargo, Sony Pictures en asociación con Amblin Entertaiment decidieron darle una nueva oportunidad con un elenco más fresco. Ahora en los papeles principales Chris Hemsworth y Tessa Thompson y su dinámica de comedia crean un tono diferente aunque la esencia de la cinta continua teniendo las mismas deficiencias. El hecho de que la productora no pueda ver el potencial que tiene en sus manos es desastroso. 

La primera entrega ha sido la más importante en toda la franquicia, no solo por la dinámica cómica que tenían Will Smith y Tommy Lee Jones sino por la introducción al mundo de los extraterrestres y a la agencia que controla la información desde las sombras. Cada cinta desde la original de 1997 ha tratado de construir desde la perspectiva de los personajes cuando su mayor fortaleza es la expansión del mundo alienígena y lo que hacen los Hombres de Negro por esconderlo.

Es verdad que mientras los personajes principales tengan una química y dinámica contagiosa, la cinta puede continuar siendo interesante pero no deberían confiar en que lo es todo. En esta producción nos hablan de la organización que trasciende continentes, facciones de la misma agencia se extienden por todo el globo como era de esperarse, sin embargo nos muestran muy poco sobre lo que los personajes pueden hacer y lo que tienen a su disposición. Aquí nos entregan un perfil psicológico inestable en los protagonistas muy al estilo de la encrucijada de un héroe que fracasa y no encuentra motivación para seguir adelante. Es importante darse cuenta de que si bien es relevante mencionarlo para desarrollar bien a las figuras principales también deben soportar la construcción del mundo que les rodea, siendo esa la parte más interesante.

Chris Hemsworth hace el papel del agente H un veterano agente que ha dejado de lado el código que defiende por la vida sencilla y galante del despilfarro social, Tessa Thompson por su parte es una novata que desea descubrir los secretos del universo, juntos se complementan para darse fortaleza y dirección y por supuesto entregar al espectador una interesante propuesta. En realidad tienen éxito al remodelar la situación con nuevos personajes como los ya mencionados pero todo lo demás en la producción parece más de lo mismo. No se siente que nos cuenten una nueva historia sino que tratan de rellenar los huecos de las anteriores, esta vez claro con una renovada fe en los efectos visuales los cuales son con cada película más espectaculares.

Las participaciones de Emma Thompson como la agente O dirigente de la facción en Nueva York y Liam Neeson como el agente High T comandando la facción de Londres es interesante, revitalizan cada escena en la están presentes aunque el guión no ayuda mucho pues la información detrás de todo esto es poca. La cinta no habla de grandes hazañas del pasado y nunca explican el porqué o la razón de ser de estas, falta contexto en la película y eso deja mucho peso que soportar a los protagonistas que si bien hacen su trabajo, distan mucho de entregar una buena película.

La producción lleva dirección de querer hacer más por la franquicia pero aunque el director más experimentado se involucre y la productora siga creyendo que lo vital son los personajes y no el mundo que les rodea, las cintas están destinadas a fracasar pues no pueden hacer que el espectador se interese sino le dan algo concreto a lo que aferrarse. Vayan a ver esta cinta solo si gustan de las bromas vergonzosas por las que hacen pasar a los personajes que solo están ahí para verse bien en un traje negro.

Valoracíon: 2/5

Lo Mejor: Las actuaciones de Chris Hemsworth y Tessa Thompson

Lo Peor: La cinta nos da mas de lo que ya bien conocemos en esta franquicia y no propone nada nuevo.

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