En 2005 se creó Laika, un estudio de animación stop-motion estadounidense especializado en largometrajes, vídeos musicales y cortometrajes. Sin embargo, no fue hasta 2009 cuando saltó a la fama gracias a Los mundos de Coraline, dirigida por Henry Selick y que se convirtió en poco tiempo en un film de culto. Tras la producción de tres cintas más (El alucinante mundo de Norman, Los Boxtrolls y Kubo y las dos cuerdas mágicas) llega Mr. Link. El origen perdido, dirigida por Chris Butler, y que combina de forma magistral la comedia con el género fantástico y de aventuras.
La película comienza con la historia del carismático Sir Lionel Frost, quien se considera a sí mismo el investigador de mitos y monstruos más importante del mundo. El problema es que ninguno de sus colegas le reconoce como tal. La última oportunidad de Sir Lionel para ser aceptado por la élite de los aventureros será viajar al noroeste del Pacífico de América para probar la existencia de una criatura legendaria. Una vez allí, el protagonista conocerá a Mr. Link, una atontada, sorprendentemente inteligente y enternecedora bestia de la que dependen sus sueños. Ahí, también se encontrará a Adelina Fortnight, una independiente y habilidosa aventurera. Los tres tendrán que enfrentarse a numerosos peligros y villanos que no les dejarán en paz a lo largo de su aventura.
Chris Butler vuelve a repetir bajo la dirección de un film de Laika después de su estupendo trabajo en El alucinante mundo de Norman. En Mr. Link. El origen perdido, se aleja del terror infantil para dar paso a la aventura y a la comedia más exquisita. La película es bastante inteligente y, en ella, la belleza artesanal de la animación con plastilina se combina con los hallazgos del digital para crear una miniatura preciosa que camina con armonía de funambulista por una trama delgada, simple y eficaz.
Mr. Link. El origen perdido es una experiencia visual de primera magnitud, una señera de la animación en la que las escenas memorables se pisan los talones. Además, es francamente brillante el diseño de unos personajes que gustarán mucho al espectador, ya que conectarán con ellos al contar con un carácter entrañable y que emocionará a todos los públicos.
Un divertimento inteligente y altamente elaborado, siendo un virtuoso compendio de pop-up y pop-art. Como cada trabajo de Laika, Mr Link. El origen perdido es la obra de un equipo de animadores con pleno dominio de la versatilidad de la poesía trenzada fotograma a fotograma. La historia, pese a que no es demasiado novedosa, es bastante entretenida y logra ser un vehículo para la belleza pictórica y meticulosamente detallista.
A través de su hora y media de metraje, Laika sigue demostrando muestras de excelencia con un trabajo absolutamente portentoso. Una cinta tan visualmente cautivadora, tan llena de texturas emocionales y tan dotada de poder alucinatorio que apartar la mirada de ella resulta casi imposible. Una auténtica obra maestra de orfebrería visual, refinadísima y de una minuciosidad casi inabarcable. Una muestra más de que los films de animación no tienen por qué tener un gran presupuesto y que hay vida más allá después de Disney. Ahora, solo nos queda esperar y ver qué próximas sorpresas nos tiene preparadas una de las compañías animadas más prometedoras de los últimos tiempos.
Valoración: 4/5
Lo mejor: Su exquisita animación y un argumento que está hecho para entretener a todo tipo de público
Lo peor: Que su argumento no esté a la altura de unos recursos estéticos que son sorprendentemente brillantes y llamativos