Este 2019 promete muchas novedades en lo que respectan las producciones audiovisuales. El regreso del vaquero Woody y sus amigos en Toy Story 4, el remake en live action del Rey León y Star Wars IX: The rise of Skywalker a finales de año son películas esperadas por los amantes del séptimo arte. Sin embargo, la película Avengers Endgame y la octava temporada de la serie Game of Thrones (GOT) son las que han acaparado mayor atención del público y los medios de comunicación en estos primeros cuatro meses del año.
Con cada teaser, tráiler o afiche promocional los títulos de Endgame y GOT son tendencia en las redes sociales y como lo indica la pregunta en este post ¿Se justifica tanto revuelo por esta película y serie? ¿Es usual que los espectadores inviertan horas en visualizar 21 películas del universo Marvel y 67 capítulos de Game of Thrones previo al estreno de ambas producciones?
Para responder las interrogantes anteriores es necesario considerar varios aspectos. El primero de ellos es que Game of Thrones es la adaptación de la saga Canción de hielo y fuego escrita por George R. R. Martin que consta, hasta el momento, de cinco libros publicados entre 1996 y 2011. Por lo que desde su estreno en HBO en 2011, GOT ya tenía un respaldo de público que conocía la historia la cual procuró mantenerse fiel a las novelas hasta la quinta temporada, puesto que ha partir del sexto ciclo la producción audiovisual tomó un camino distinto a los libros.
Otro elemento importante son los personajes de Game of Thrones que se ganaron el afecto del público y que abruptamente murieron sin importar si dichos roles eran protagónicos o secundarios. Con esto, los espectadores tuvieron que acostumbrarse a los vuelcos sorpresas en la trama de la serie y a despedirse de sus personajes favoritos.
Un dato curioso con respecto a GOT, es que a lo largo de sus siete temporadas ha ido sumando fanáticos, en comparación con otras series que se extienden por muchas temporadas y cuyos seguidores comienzan a desistir de visualizarlas, Game of Thrones ha resultado ser un caso opuesto.
Por otra parte, con las películas de Marvel ocurre algo similar. Desde que se estrenó Iron Man en 2008, se han incorporado distintos personajes para realizar el tan esperado crossover de Avengers Infinity War. Sin embargo, ha sido Tony Stark, encarnado por Robert Downey Jr., la piedra angular de este universo cinematográfico en el que Disney Studios ha trabajado por casi 11 años para llevar a la gran pantalla 21 filmes.
Si el año pasado Infinity War fue éxito de taquilla recaudando más de 2 mil millones de dólares a nivel mundial, este año Endgame promete lo mismo. No por nada en varios países cuando se inició la preventa para el estreno de la cinta, las entradas en algunos cines se agotaron en sólo dos horas, llegando incluso a colapsar las páginas webs de los recintos para adquirir los tickets.
Pero el motivo más relevante que explica este fenómeno de GOT y Endgame, es que ambas producciones han marcado a una generación de espectadores tal como hace algunos años lo hizo Harry Potter, Star Wars en su primera trilogía de 1977, o Lost y The Soprano en lo que respecta producciones televisivas.
Por lo tanto, no es extraño que Endgame y GOT acaparen tanta expectación a días de sus estrenos ya que con ello culminará un proceso de varios años de trabajo en que los espectadores han sido testigo de la evolución de sus personajes favoritos y las altas expectativas que han dejado los avances de ambas producciones que prometen dejar una huella en la historia de la pantalla grande y chica.