El próximo 28 de abril tendrán lugar las elecciones generales para elegir al nuevo Presidente del Gobierno. Aún no hace ni un año que Pedro Sánchez, Secretario General del PSOE, presentaba una moción de censura contra el hasta entonces presidente, Mariano Rajoy. Esa moción de censura tuvo lugar el 1 de junio de 2018 que llevo a la presidencia a Pedro Sánchez.
Pero esa moción vino provocada por los numerosos casos de corrupción que estaban sacudiendo al Partido Popular y que provocó una reacción en la izquierda.
Desde ese momento, la derecha desde el bando de la oposición ha reiterado que Pedro Sánchez no ha sido elegido por la ciudadanía y que, por lo tanto, no debería de estar ahí. Sin lugar a dudas, al nuevo Presidente no se lo han puesto nada fácil, porque el pasado 2 de diciembre tuvieron lugar las elecciones andaluzas.
Esas elecciones no dejaron indiferente a nadie, ya que, bajo sorpresa de todos, la extrema derecha entraba por todo lo alto en el sur de la península consiguiendo 12 escaños y formando coalición con PP y Ciudadanos para un gobierno de derechas en Andalucía, por primera vez en más de 40 años.
Tras el auge de la derecha en la parte sur de nuestro país y con una izquierda debilitada tras esas elecciones, llegamos a unas elecciones decisivas y determinantes, en la que los políticos intentarán captar la atención de los indecisos y esperemos que esta vez la participación ciudadana sea más elevada que en las andaluzas, cuya participación no llegó ni al 60%.
Estamos cada vez más cerca de conocer al nuevo Presidente del Gobierno, esta vez sí será elegido por el pueblo y veremos si continúa el buen estado de la derecha o en este caso, la izquierda vuelve a resurgir tras el duro golpe en las pasadas elecciones andaluzas.