En 2003 nació ‘Johnny English’, una divertida película que mezclaba comedia y acción y que pretendía servir como parodia a los filmes de espionajes. Gran parte de su éxito se debió al carisma y a la comicidad de Rowan Atkinson que, pese a funcionar mejor con Mr Bean, prometía todo lo que se esperaba, siendo un producto más que correcto.
Esta vez, el encargado de dirigir la cinta es David Kerr, suponiendo su primer trabajo en la gran pantalla. En esta ocasión, un hacker ha revelado la identidad de todos los agentes encubiertos de Gran Bretaña. Es por esto por lo que Johnny English se verá obligado a posponer su retiro profesional y volver a la carga como espía para encontrar al autor de los hechos.
Con una primera escena que no tiene nada que enviar a los filmes de acción, ‘Johnny English: De nuevo en acción’ se desarrolla de una forma muy previsible, aportando poco más de lo que la saga nos ha ofrecido hasta el momento.
Aún así, el nivel de comicidad de esta tercera parte es superior al de la segunda, ofreciendo más carcajadas y con secundarios como Emma Thompson que son capaces de eclipsar incluso al carismático Rowan Atkinson.
Johnny English cierra una trilogía de la mejor forma. En su tercera entrega ha sabido mantener el listón e incluso superar a la secuela estrenada hace siete años. Sin lugar a dudas, el ver de nuevo a Rowan Atkinson hace que al espectador le entren muchas ganas de volver a ver a Mr Bean. Seguro que si se decidiese apostar de nuevo por este personaje, las risas estarían aseguradas, así como unas buenas cifras en la taquilla mundial.
Valoración: 3/5
Lo mejor: Volver a ver a Rowan Atkinson. Ojalá contarán con él en más filmes humorísticos.
Lo peor: Que recurre demasiado al humor fácil y poco elaborado.