Tras el esperado referéndum del día 1-O para el pueblo catalán, las detenciones, la fuga de empresas y la falta de entendimiento entre el Gobierno central y el Govern, todo hacía esperar que Carles Puigdemont votase la Declaración Unilateral de Independencia el pasado día 10 de octubre en el Parlament de la Generalitat.
No ocurrió finalmente lo que tanto ansiaban los independentistas. Puigdemont quiso establecer otra vía, la vía de la negociación, defraudando a muchos de los partidarios de la separación de Cataluña del Estado español.
Aún así no se ha producido ninguna conversación entre las dos partes y, además el presidente de la Generalitat, quiso recalcar en sus respuestas al Gobierno (que le pedía una respuesta clara para saber si había declarado o no la DUI, algo que no ocurrió) que el diálogo era la vía para el entendimiento.
El sábado puede ser la día clave
Después de todos estos hechos, el Gobierno ha enviado un comunicado en el que expresa que “a las diez horas de esta mañana, la negativa del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont a atender el requerimiento que le fue remitido el pasado 11 de octubre y en el que se reclamaba que informara de forma clara y precisa si alguna autoridad de Cataluña había procedido a declarar la independencia de esa comunidad autónoma y se le instaba a restituir el orden constitucional alterado”.
Esta era la respuesta del Estado a Puigdemont, que tendrá como consecuencia el avance 'imparable' de la implantación del 155 “para restaurar la legalidad en el autogobierno de Cataluña”. Por otro lado, las medidas para instaurar dicho artículo se tendrán que aprobar este sábado en el Consejo de Ministros.
Aunque este proceso puede verse interrumpido si en Cataluña se consiguiesen celebrar elecciones autonómicas anticipadas. En ese caso el Gobierno detendría la aplicación del 155. Por su parte, los partidos independentistas con presencia en el Congreso como Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y PDeCAT, consideran que “aún hay tiempo”, según afirma Carles Campuzano (portavoz de PDeCAT) que también apuntó que "mantendrán la tregua hasta este sábado", queriendo dejar claro que no habrá DUI hasta tal fecha.
En el comunicado también se declaraba que el Consejo de Ministros extraordinario del sábado, “aprobará las medidas que elevará al Senado a fin de proteger el interés general de los españoles, entre ellos los ciudadanos de Cataluña y restaurar el orden constitucional en la Comunidad Autónoma”. Por otro lado, El Gobierno reconoce la ayuda de las formaciones políticas “con las que está cerrando en estos momentos una respuesta mayoritaria y consensuada al desafío secesionista”.
¿Cada vez más cerca de la DUI?
La falta de negociación y entendimiento que está habiendo entre estas dos partes puede propiciar que el bando independentista siga adelante con la DUI y todo lo que ello conllevaría. Si este sábado finalmente se diera la aplicación del 155, el Govern actuaría en consecuencia como ya se ha explicado siendo este hecho el detonate final.
Los arrestos a altos cargos del Govern no ayudan a que se entable una conversación que podría suponer la no separación de Cataluña del Estado español. Por ello, es de suponer que a cada día que pasa, la Generalitat está más cerca de declarar la DUI y cerrar así toda posibilidad de diálogo. Los motivos para esto están aumentando y parece que ya son más que suficientes.
En su última respuesta Puigdemont ha destacado que no ayuda nada a la situación las detenciones por presunto delito de sedición de los líderes de Òmnium y la ANC. "Tampoco ha sido atendida la petición de revertir la represión. Al contrario, se ha incrementado y ha comportado la entrada a prisión del presidente de Omnium Cultural y el presidente de la Asamblea Nacional Catalana, entidades de acreditada trayectoria cívica, pacífica y democrática".
El 155 no es unánime
Mientras que Miquel Iceta, secretario del PSC, cree que la “amenaza de declaración de independencia” declarada por Puigdemont “hace inevitable que el Estado inicie los trámites para aplicar el artículo 155 de la Constitución”. El coordinador nacional del PP, Fernando Martinez-Maillo, opina que "los responsables de que se aplique el artículo 155 son el señor Puigdemont, el señor Junqueras y sus socios de gobierno". Y, por su parte, el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, destaca que "una democracia no puede aceptar chantajes. No aceptamos chantajes el 23-F, no aceptamos chantajes con el terrorismo y no aceptamos chantajes ahora".
Por su parte, Pablo Iglesias sigue demostrando su descontento con la aplicación del 155 ya que considera que esto es "echar más leña al fuego" a la crisis catalana. "Aplicar el 155 después de que no haya habido declaración de independencia supondría una involución democrática", ha afirmado el secretario general de Podemos, que no está a favor de esto y está en contra del 'frente constitucional' formado por PP, PSOE y Ciudadanos.
Es muy complicado anticiparse a lo que puede ocurrir en los próximos días tanto en Cataluña como en el resto de España. Lo que si parece quedar claro es que el artículo 155 seguirá adelante tras la celebración del Consejo Extraordinario de Ministros del sábado, cuya consecuencia será casi con toda seguridad la DUI por parte de la Generalitat.