Desde hace ya tiempo hemos podido ver como el cine de terror descendía hasta los suburbios donde habitan aquellas películas a evitar si quieres disfrutar del buen cine. Títulos como 'El heredero del diablo' o 'El proyecto de la bruja de Blair' habían hecho bajar un escalón a este género provocando desconfianza en los últimos estrenos. Poco hay que remontarse para encontrar una película que recoge todos estos puntos que acumulan las películas de terror malas, y no es otra que 'Ouija 2'. Sustos sin sentido, forzados y previsibles; un guión que recoge todos los clichés posibles y un final desastroso y sin ningún tipo de explicación.
La diferencia principal de 'Rings' con el resto de fiascos es el final. Porque en este tipo de películas el desenlace se mira con lupa.Este introducción no tiene que ver con la película, pero es precisamente por eso por lo que es necesaria antes de valorar 'Rings'. Porque la cinta de F. Javier Gutiérrez demuestra que se puede hacer una película de terror sin caer en los clichés, sin esa criada hispánica que cuenta el mito que "casualmente" se da en la historia; que se pueden incluir sustos sin calzador, que se puede contar con buenos actores y, sobretodo, que se puede ofrecer un final sorprendente con explicación coherente con el resto de la película.
La historia es ya universalmente conocida. Ves el vídeo que no deberías ver, al instante suena el teléfono y escuchas: 'Siete días'. Pasado este tiempo podrás comprobar como viene por ti esa niña con la cara oculta, oscura y ese vestido blanco. Da igual que tu aparato no esté funcionando, ella saldrá de la pantalla y será lo último que veas.
Algunos puntos de la película recuerdan a otra gran película de este mundo como es 'Arrástrame al infierno'. Tener un periodo de tiempo tras el cual sabes que la cosa no acabará bien y los preliminares que son peores debido a los contantes avisos de que todo va a ir a peor.
Algo más de tiempo para crear una historia más sólida hubiera sido un acierto ya que cuando la trama principal empieza a desarrollarse todo sucede demasiado rápido.
La diferencia principal de 'Rings' con el resto de fiascos es el final. Porque en este tipo de películas el desenlace se mira con lupa. La culminación de la historia, la explicación (cuando la hay) de todo el mal visto y el hecho final que deje al espectador con la boca abierta. Todo ello es siempre piedra de tropiezo para las películas de terror. Sin embargo, es aquí donde la película se hace fuerte y termina por todo lo alto con un final sorprendente y sobretodo explicado y lógico (que ya era hora).
Lo mejor: El elenco. Contar con Johnny Galecki ('The Big Bang Theory) y Alex Roe ('La quinta ola') acaba por resultar el gran punto de la película. Estos dos actores aportan solidez a la película. Cabe destacar los primeros planos del actor belga quien desempeña perfectamente su roll (tampoco se hubiera quejado nadie si se hubiera dado más tiempo en pantalla a su personaje). Roe, por su parte, demuestra que puede hacer algo serio tras el fiasco de 'La quinta ola'. Su interpretación termina resultando esencial. Para quitarse el sombrero la última escena.
Lo peor: Continúa la búsqueda. Aunque esta película suponga un paso adelante en el género de terror todavía se echa en falta esa tensión y sustos constantes propios del género y todo lo que su busca en este tipo de película. Hay sustos pero todavía queda para mantener al espectador pegado al asiento en tensión constante.