El Festival de Málaga comienza a calentar motores para su 19ª edición y el primer paso, como cada año, ha sido el de elegir el cartel que dará imagen e identidad a un certamen audiovisual que focaliza lo mejor del cine español en la capital costasoleña.
De entre las 380 obras presentadas a concurso, ha sido finalmente la de Armando Jiménez la elegida. Este Licenciado en Administración y Dirección de Empresas y Técnico Superior en Gráfica Publicitaria y Comunicación Audiovisual, ha querido representar el corazón del Festival malagueño a través de numerosos objetos y símbolos propios del séptimo arte.
Diferentes películas españolas como Ocho Apellidos Vascos, El Verdugo, Amanece que no es poco , Carmina y Amén, Rec, Magical Girl, Tesis, Alas de Mariposa, Caniche, Furtivos, Tiempo de Silencio, Viridiana, Nadie hablará de nosotras cuando hayamos muerto, La Comunidad o El cochecito han sido representadas con algunos de sus símbolos más reconocibles. Entre todos, forman un corazón que rodea la Biznaga, elemento característico de Málaga y el propio Festival.
El fondo del cartel este año toma color anaranjado y en su parte inferior se localiza la tipografía en la que se lee '19 Festival de Málaga Cine Español 2016' y la fecha de celebración del mismo, que este año será del 22 de abril al 1 de mayo de 2016.
A la presentación celebrada en el Salón de los Espejos del Ayuntamiento de Málaga, acudieron además del premiado Armando Jiménez, el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, el director del Festival de Málaga, Juan Antonio Vigar, la concejala de Cultura del Ayuntamiento de Málaga, Gemma del Corral, María Eugenia Merelo, jefa de área de Culturas de Diario Sur y Ada Bernal, directora regional de Relaciones Institucionales de Heineken España.
El autor sevillano tuvo palabras para definir la obra elegida. "Mi corazón de cine está hecho de pasión, de entusiasmo, de esfuerzo, de valentía. La pasión, el entusiasmo, el esfuerzo y la valentía de todos los realizadores españoles que nos han hecho soñar en algún momento de nuestra vida. De los actores que nos han hecho reír o llorar. De los directores de fotografía que han iluminado los rincones más recónditos de nuestra imaginación. De los escenógrafos que han construido nuestros mejores sueños y nuestras peores pesadillas. En definitiva, la de todas aquellas personas en nuestro país que decidieron dedicar sus vidas a hacer las nuestras más divertidas, más trágicas, más emotivas o más surrealistas", comentó.