Todos los informativos se han hecho eco de la noticia. No es de extrañar: el festival Arenal Sound se caracteriza por ser un festival de playa, sol y mucho calor. Pero este año los ‘sounders’ han vivido algo distinto. 

Julia y Paula, dos sounders que se encontraban en el glamping cuando comenzó la tromba de agua, nos cuentan cómo lo vivieron. “Cuando vimos que empezaba a llover, pensamos ‘no pasa nada’, pero empezó a llover muchísimo y decidimos esperarnos en la tienda de campaña a que parase un poco.” Por supuesto, la lluvia no se detuvo y comenzó a caer con más fuerza. “Se oía a la gente por fuera cómo chillaba mientras corría por el agua”, añaden. 

“Eso fue a eso de las once.” Ellas querían asistir al concierto de John Newman, pero cuando estaba por finalizar Rudimental, detuvieron el espectáculo y anularon los conciertos del resto de la noche. Esto sucedió sobre las dos menos cuarto de la madrugada. 

“Nos acostamos, pero seguíamos oyendo como llovía, así que estábamos un poco asustadas por si la tienda cedía por el peso del agua”.

Fue al día siguiente cuando pudieron ver los estragos de la lluvia de la noche anterior. “Nuestra zona estaba más o menos bien. Pero muchos otros han tenido que mover las tiendas y evacuar el agua. Había gente limpiándolas en las duchas, y muchos otros han ido cara a los de seguridad para exigir explicaciones, porque mientras llovía nadie nos decía nada, ni siquiera se ofrecieron para ayudar”.

A estas horas los más afectados por estas lluvias han sido relajados en varios edificios municipales y han sido atendidos por voluntarios de Cruz Roja y Protección Civil de Burriana, así como por el Consorcio Provincial de Bomberos y el personal del propio festival. 

Aún así, se han hecho de esperar. Así nos lo contaban estas dos chicas esta mañana: “La gente está en las carpas con las tiendas y las maletas abiertas, intentando secar la ropa. Ahora mismo hay un poco de caos. Todo el mundo está descolocado. Nadie ha venido a comprobar nada, ni a preguntar si estábamos bien.

Aseguran que ellas han tenido suerte, pues en la zona en la que ellas se encontraban no ha habido demasiadas incidencias. “La gente que estaba en las zonas donde no había lonas han tenido que tirar las tiendas. Hay gente que se ha quedado sin nada por la lluvia”.

Desde la organización han insistido en que no ha habido grandes incidencias y que todo se ha llevado con gran normalidad. Esta mañana han asegurado en su cuenta de Twitter que “si el tiempo lo permite, confiamos en que sí, disfrutaremos de la música en esta jornada. Los campings están controlados y seguimos trabajando.”