Tal día como hoy hace 120 años comenzó todo. El 22 de marzo de 1895, por primera vez en la historia, un grupo de personas se reunieron para asistir a la proyección de una película en una sala a oscuras. El séptimo arte daba sus primeros pasos.
Los hermanos Auguste y Louis Lumière, autores de la obra, la habían filmado apenas tres días antes con un aparato capaz de grabar y proyectar imágenes en movimiento, el cinematógrafo. La Sortie de l'Usine Lumière à Lyon duraba 46 segundos y mostraba la salida de los obreros de la fábrica de fotografía que los célebres hermanos tenían en Lyon. Esos primeros segundos de cinematografía, que retrataban a mujeres vestidas con largas faldas blancas y algunos hombres en bicicleta abandonando el lugar, fueron proyectados en la penumbra de una sala de la Sociedad Francesa de Fomento de la Industria Nacional, a un grupo de especialistas que participaban en un convenio sobre fotografía. El éxito entre los asistentes propició que los hermanos Lumière se decidiesen a organizar un pase al público general en París, cobrando entrada, en diciembre de ese mismo año. Había nacido el cine.
Doce décadas después, una exposición en el Grand Palais de París rinde homenaje a semejante hito histórico. Desde el próximo viernes 27 se organiza "Lumière! Le Cinéma Inventé", una muestra en la que se proyectarán por primera vez juntas las más de 1.400 películas filmadas por los hermanos Lumière (de alrededor de un minuto de duración cada una). Se expone el cinematógrafo utilizado para rodar y exhibir Salida de los obreros de la fábrica Lumière. La muestra recrea el Salón Indio del Grand Café parisino donde se realizó la referida primera proyección al público.
Además, la exposición recupera las muchas innovaciones técnicas de los Lumière y pone atención en nuestra vinculación actual con el séptimo arte, a través de una serie fotográfica del cineasta William Klein. Se exhiben también distintas revisiones de la salida de la fábrica, encargadas por el Instituto Lumière a grandes maestros del celuloide actual, como Quentin Tarantino, Pedro Almodóvar, Paolo Sorrentino, Michael Cimino, Jerry Schatzberg o Xavier Dolan.
Thierry Frémaux, del Instituto Lumière, comisario de la exposición, y además, director artístico del Festival de Cannes afirma que existe mucha ignorancia sobre el origen del cine y niega, por ejemplo, que los Lumière sentenciasen en su día que el cine no tenía futuro, algo que, dice, se cae por su propio peso, cuando hicieron casi 1.500 películas. "Los Lumière eran muy conscientes del enorme potencial del cinematógrafo", asegura. En palabras de Frémaux, "hace 120 años la gente buscaba en el cine lo mismo que buscamos hoy: estar juntos en una sala, a oscuras, compartiendo emociones ante una gran pantalla".