El terror ha vuelto a apoderarse del mundo. Esta vez, las víctimas han sido los ciudadanos de Saná, la capital de Yemen. Según ha publicado CNN, los objetivos han sido dos mezquitas: la de Badr y la de Al Hashahush. Ambos lugares son muy concurridos por los fieles musulmanes, y las explosiones se produjeron en horario de máxima asistencia.
En la mezquita de Badr hubo dos explosiones. La primera se produjo en el interior del edificio, mientras que la segunda ocurrió en la entrada poco después. Con la segunda explosión, resultaron heridos todos los supervivientes de la primera, quienes intentaban huir del lugar. Se desconocen las condiciones de la explosión en la mezquita de Al Hashahush. En total, la cifra de muertos es de 120, y los heridos son más de 300.
El país entero ha entrado en pánico, y los hospitales de la ciudad han pedido donaciones masivas de sangre. Al mismo tiempo, el presidente de Yemen se ha visto obligado a trasladar su residencia y la de su gobierno fuera de Saná. Mansur Hadi, presidente de Yemen, ha acusado a su predecesor, Abdulá Salé, de los atentados.
Saná, tomada por los terroristas
Desde el pasado mes de febrero, la capital de Yemen ha sido tomada por los huthis, un grupo terrorista del mencionado país. Esta organización ha sido acusada de cometer los atentados en las dos mezquitas. Según Mansur Hadi, Salé podría estar detrás de estos actos, entre los que se encuentran un intento de golpe de estado.