El pasado domingo se presentó al público la estatua de bronce en honor a la cantante Amy Winehouse en el barrio londinense de Camden; un momento que no se quisieron perder algunos de los fans de la artista de todo el mundo, que se reunieron allí para celebrar este momento que le rinde homenaje.
Scott Eaton creó esta estatua queriendo reflejar la fuerza y actitud de Amy, al mismo tiempo que dejaba ver un sentimiento de inseguridad. “La mano en la cadera, el ladeo de cabeza, la forma en que se sujeta la falda, la postura de los pies... son elementos pequeños que contribuyen a la personalidad de la pieza”, ha comentado el artífice.
El día de la inauguración coincidió con el día en que la cantante hubiese cumplido los 31 años; un día que ni siquiera los padres de Amy quisieron perderse. “No colocan estatuas de gente que aún está con nosotros, así que refuerza el hecho de que físicamente se ha ido, pero espiritualmente nunca nos dejará", señalaba el padre de la cantante, Mitch Winehouse.
Sin duda alguna, es un gran homenaje a la cantante. Una manera de recordarla positivamente y de conseguir que sus fans, desde cualquier rincón del mundo, puedan compartir, en cierto modo, un momento de sus vidas junto a ella.