Los hermanos Coen son una pareja de hermanos conformada por Joel e Ethan Coen, su pasión por el cine viene desde muy pequeños cuando lograron hacerse con una Super 8 para rodar sus pequeñas películas ayudados por amigos y familiares. Es con su opera prima Sangre Fácil cuando lograron el primer éxito y a partir de ahí lograron hacerse un hueco en la complicada industria del cine estadounidense
Pronto se apasionaron por las comedias negras, este género cinematográfico consiste en crear una comedia pero con tintes de humor negro, para ello se cuida la estética, los diálogos, la trama y a veces se introducen muertes trágicas pero que al estar introducidas en una trama cómica son percibidas por el público como una pieza más del engranaje cómico de la película y por tanto son recibidas como divertimento y risas y no como tristeza y lágrimas .A los Coen les gusta jugar con el espectador y hacerles creer cosas como reales cuando en realidad es todo producto de su insondable imaginación. Un ejemplo clarísimo es cuando en Fargo escriben al principio de la película que es un hecho real, cuando obviamente no lo es
Otro aspecto importante son las moralejas y reflexiones que intentan dejar en sus películas para que el espectador recapacite y piense sobre ellas incluso después de haber terminado la película. Los Coen hacen películas que si se analizan superficialmente pueden parecer mero divertimento pero la realidad es que dentro de ellas hay escondidas críticas a la sociedad y al ser humano y a la forma que tiene de comportarse en su forma de vivir.En Quemar después de leer, por ejemplo, los personajes que están obsesionados con el poder, el dinero y la belleza exterior, los Coen nos intentan hacer ver que esos valores no son los importantes de la vida y las personas se deben dar cuenta de esto antes de que sea demasiado tarde.
Diálogos hilarantes
Otro rasgo de los Coen es que muestran siempre que no hay salvación posible para los personajes con dudosa ética moral o exagerada ambición y su habilidad genial para crear diálogos dinámicos y cómicos que dan toda una estructura a cada una de sus películas.. En El gran salto por ejemplo podemos destacar cuando el protagonista presenta el Hulla Hop y le hacen preguntas de si hay alguno para obesos, si lleva pilas, que cuando se acaba el juego y que hacen los niños cuando se cansan de girarlo para terminar con un escueto y genial ¿Que coño es eso? . Esta película de El gran salto es claramente un sentido homenaje al cine más puro de Frank Capra. Tambien hay que destacar los geniales diálogos de otras de sus obras culmen como es El gran Lebowski.
Otro rasgo característico de Joel y Ethan es la denuncia de la violencia injustificada de la que tiñen casi todas sus películas. En casi todas las películas de los Coen en sus tramas algún personaje mata a otro casi sin ninguna razón simplemente por el hecho de usar la violencia, el placer de matar o la rutina del acto. Donde mejor se ve reflejado es en Fargo cuando en una elipsis uno de los delincuentes mata a la mujer secuestrada porqué “chillaba mucho” o en Quemar después de leer donde el asesinato es casi representado como una parodia y un acto cotidiano del que todos participan a sangre fría.
Estética, montaje y música muy logrados
En los rasgos autorales técnicos destacan: El uso del fuera de campo para incentivar el misterio y el suspense incluyendo asesinatos e incluso tramas fundamentales de la historia representadas de esta forma, como en Quemar después de leer o Fargo. La estética de sus películas está muy cuidada y están estudiadas al máximo detalle, por ejemplo al estética creada en forma de cómic de El gran salto o la ambientación de las famosas películas de espías en Quemar después de leer. El montaje es cadencioso con planos generales pero no dudan en convertirlo en un montaje vertiginoso cuando la acción lo requiere. La utilización de la música dentro de sus tramas para incentivar y crear planos sonoros en escenas que tienen el campo muy cerrado, a través de la música y los efectos se sitúan a los personajes y se incentiva el suspense en otros casos. El artífice de esta música es casi en su totalidad de las películas Carter Burwell, que se ha convertido en pieza clave en las películas de los hermanos Coen. Ethan y Joel son también amantes de los giros inesperados pero bien argumentados y no inventados por el simple de hecho de crear uno, esto provoca que siempre intenten sorprender al espectador porqué como se ha comentado anteriormente dan una importancia capital al espectador.
En definitva Los Coen son una pareja de directores que se han convertido en imprescindibles en el cine, es cierto que no solo realizan comedias negras, pero en este caso se ha incidido solo en este aspecto porque abarcar el mundo Coen en su plenitud no es nada sencillo. Por último apuntar que tras su comedia dramática con tintes de road movie A propósito de Llewyn Davis llegará en 2015 una comedia sobre el mundo Hollywood de los años 50 Hail Caesar, por tanto ya queda menos para descubrir que es lo nuevo que tienen preparado esta singular pareja de directores
