Aterrizaba en la riviera francesa marcada por la polémica. Tal vez por ello, su estreno era uno de los más esperados de la programación. El morbo y el cine casan como nadies, y si a esta receta añadimos una pizca de biografía, una antigua estrella de cine clásico como protagonista, y una casa real incómoda de por medio, la expectación está garantizada. Es lo que ocurrió con Grace of Monaco, el filme de Olivier Dahan (La vida en rosa), encargado de levantar el telón de fondo de la 67 edición del Festival de Cannes este miércoles.
El biopic, protagonizado por Nicole Kidman, Tim Roth, Jeanne Balibar y Paz Vega, se centra en los seis meses más difíciles que Grace Kelly vivió durante su reinado. Año 1962, Mónaco pasaba por uno de los mayores conflictos diplomáticos de su historia con la vecina Francia, a causa de las ventajas fiscales que ofrecía el pequeño país. Durante ese período, la princesa fue un papel clave en la labor diplomática que ejerció Mónaco frente a la crisis y que evitó que el asunto pasara a mayores. Mientras, Alfred Hitchcock insistía a Grace Kelly que aceptara el papel de Marniela, la ladrona (que finalmente recayó en Tippi Hedren).
"Quise realizar un retrato completo: la actriz, la mujer, la intimidad de sus decisiones", concreta Dahan
"Al limitarme al año 1962 quise realizar un retrato completo: la actriz, la mujer, la intimidad de sus decisiones. Una mujer casada, con hijos, que debe enfrentar verdaderos conflictos internos", explicó Olivier Dahan durante la conferencia de prensa posterior a la exhibición de la película. Desafortunadamente, su retrato no gustó mucho entre la prensa especializada que tachó de "telefilme barato" y "lacrimógena" al primer proyecto que presenta en la Croisette.
No es el único que recibió los dardos envenenados de la crítica. Nicole Kidman también se llevó su buena ración de reproches. Su ya más que comentada inexpresividad (muy presente en los últimos años) le hace un flaco favor a su limitada encarnación de la musa de Hitchcock. No obstante, ella sabía muy donde se metía con este personaje, tal y como reconoció ante la prensa congregada en la Costa Azul: "Fue un gran desafío, ya que se trata de un personaje sumamente memorable, pero ha sido maravillosa la experiencia de vivir su vida durante seis meses". La australiana, una vieja amiga del certamen, regresa a Cannes tan solo un año después de formar parte del jurado oficial que entregó la Palma de Oro a La vida de Adèle.
Olivier Dahan se defiende
Como era previsible, en la conferencia de prensa no tardó en salir a la palestra la creciente irritación de la Casa Real de Mónaco con la película (cabe recordar que Alberto, Carolina y Estefanía emitieron a principios del pasado año un comunidado donde acusaban a la producción de ser "farsa" y "ficticia"). Ahora, es el turno de réplica de Olivier Dahan. "No se trata de una película biográfica aunque todo es verdad", argumentó el cineasta, quien insistía una y otra vez que su cinta habla de "cine, nunca pensé en hacer un biopic". Kidman también tuvo tiempo de defender el proyecto: "Me entristece su reacción, la película no tiene malas intenciones hacia la familia, simplemente es novelada".
Pero no todas son malas noticias para Grace of Monaco. Tras un estreno mundial agrio, su distribuidor, Harvey Weinstein, y los productores de la película han llegado a un acuerdo para su comercialización en Estados Unidos después de más de medio año de tira y afloja. En España, el títuto tiene previsto su estreno el 21 de mayo.
AGENDA JUEVES 15 MAYO:
La sección oficial se inaugurará con otro drama biográfico, Mr. Turner, del británico Mike Leigh. Mientras, Una cierta mirada abrirá sus puertas con la francesa Party Girl, de Marie Amachoukeli.
