Damien Rice es un titiritero de la música. Capaz como pocos de jugar con las emociones de los que le escuchan, el cantautor irlandés sabe de su don y lo aprovecha. Sus canciones se aparecen desnudas. apenas una voz a caballo entre la dulzura y la tragedia y una guitarra acústica de sonido quebradizo son capaces de obrar el milagro de la emoción artística. No hay muchos con su don para escribir esas letras tan incisivas, directas, e inspiradas. Damien suele hablar de amor y de soledad, de locura y de transiciones entre estados, de personalidades y situaciones difíciles. Habla, en fin, de lo que lo hace el arte, pero lo hace con una voz propia y reconocible y con un elemento distintivo que sólo se acierta a definir después de escuchar sus discos varias veces: autenticidad.

Y es que en Rice no hay una división entre el artista y la persona, no hay figura creada ni pose pasajera. Todo en él es permanente e identificable. Cuando le canta a la locura su voz destila demencia, cuando le canta al amor se antoja una escena de mar en calma, cuando grita, simplemente desgarra. Sus canciones son las de un hombre que trata de desahogarse. De alguna manera, el que le escucha teme haber pisado un territorio vedado para él. De pronto uno se olvida que es el destinatario de lo que está oyendo. Más bien parece que la música de Rice es una ceremonia íntima que profanamos al escucharla.

Por eso no sorprende que su trayectoria musical sea tan atípica. Su discografía se resume en dos discos de estudio, uno en directo, y un EP de rarezas. Desde que publicara 9 en 2006 el irlandés no ha pisado un estudio de grabación. Su ópera prima, O, y más adelante 9 le granjearon una gran popularidad internacional que no se esperaba. Él no disfruta de la fama, no se siente a gusto bajo los focos. Lo dejó muy claro cuando abandonó su circuito habitual de grandes festivales para viajar a Sudamérica y tocar en pequeños garitos.

En los últimos años se ha dedicado a proyectos de otra índole, descuidando su carrera solista. En Abril del año pasado colaboró con la actriz francesa Melanie Laurent en cinco canciones para su álbum debut, En t´attendant. En Febrero publicó la canción Look At Me, para una asociación benéfica argentina. En 2010 colaboró en Gasoline Rainbows, un esfuerzo colaborativo en beneficio de los afectados por el Desastre de BP y donó una nueva versión de Lonely Soldier para el album Raise Hope for Congo.

El 23 de Junio de este mismo año reapareció en un festival de grandes dimensiones: el Best Kept Secret. Algunos auguraron que esa actuación sería el preludio de una nueva fase en la carrera de Damien Rice. Sin embargo, por el momento parece que Damien no se replantea volver a publicar nada nuevo y que la experiencia fue un caso aislado

El adiós de Lisa

Te quiero aquí esta noche, te quiero aquí. Nada me esta haciendo caer, caer, caer... Excepto tú, mi amor. Excepto tú, mi amor...Son versos extraídos de I remember, canción incluida en O, que sería perfecta presciencia de lo que ocurriría años más tarde. En la canción, Rice describía el enloquecimiento por amor. El tema arranca con la suave voz de Lisa Hannigan, la que fue sucompañera musical y sentimental durante años, y termina con los gritos desgarradores de un Rice desatado.

En 2006, Damien anunció que “su relación profesional [con Hannigan] había llegado a un fin creativo”. Desde entonces, se ha especulado mucho pero son pocos los datos que han trascendido. Rice apenas concede entrevistas y Hannigan, que tras su ruptura con él inició una fulgurante trayectoria en solitario, no ha querido entrar en detalles sobre los motivos del adiós. Reconoce que trabajar con él era extenuante. Crítico, obsesivo y de carácter arisco, Rice no se lo ponía nada fácil a su compañera. En 2009, Rice rompió su silencio al declarar a un medio de comunicación que las causas de la ruptura fueron las tensiones que originaba su relación en la banda de músicos que les acompañaban. Mandaría lejos todos los éxitos, todas mis canciones, toda mi trayectoria por volver a tenerla conmigo”, decía Rice, que reconocía que había intentado retomar el contacto pero ella se había negado a hablarle: La amo mucho. La amo tanto que amo que no me haya hablado en este tiempo porque incluso eso ha hecho que haya aprendido tanto a lo largo de estos dos años.

Parece evidente que una de las causas de el retiro de Rice es el adiós de Hannigan. Quizá nunca más volvamos a disfrutarles juntos, quizá incluso Rice nunca vuelva a publicar un disco de forma convencional, pero ahora podemos recuperar las joyas en las que colaboraban juntos y saber, a ciencia cierta, que el amor al que cantaban era el amor que sentían el uno por el otro.