En septiembre comenzó la original campaña publicitaria de Arcade Fire, que con pintadas en diversas ciudades de todo el mundo anunciaban la próxima publicación del que sería su cuarto álbum de estudio, y dejando intuir que su título sería Reflektor, como finalmente ha sucedido. Desde entonces, la banda de rock alternativo ha ido filtrando contenido incluido en el doble disco, que sale a la venta este próximo lunes 28 de octubre. Sigue así la agradecida costumbre de publicar un nuevo álbum cada tres años. Y la espera siempre merece la pena.
El hecho de que James Murphy tomara el mando en la tarea de producción del álbum no ha pasado desapercibido. El creador de la excelsa LCD SoundSystem ejerce un mano a mano descarado contra los canadienses, con un resultado inesperado. El álbum adquiere un sonido que dista en mayor medida con sus tres predecesores. Markus Dravs, presente ya en The Suburbs, también ha colaborado en la producción. La grabación se ha realizado en Luisiana y Jamaica.
El primer sencillo del álbum elegido fue Reflektor, canción que abre el álbum (después de un tema escondido de 10 minutos) de manera excepcional, incluyendo un pequeño cameo de David Bowie. Se trata de una canción que en su primera escucha dejará desconcertado al oyente más tradicional. Pero, al igual que el álbum al completo, requerirá sucesivas escuchas para desgranar todos sus matices y caer rendido ante su grandeza. Y es que se trata de uno de los temas del año.
Influncias en Reflektor
Entre las principales influencias del álbum, tal como Win Butler reconoció en una entrevista concedida a Rolling Stone, se encuentra la música jamaicana y la rara haitiana. Haiti siempre es un tema recurrente en el sexteto, siendo la tierra de origen de los padres de la voz femenina del grupo, Régine Chassagne, que emigrasen desde aquel país a Canadá. Además, la película Black Orpheus del director francés Marcel Camusy el ensayo The Present Age de Søren Kierkegaard. También se incluyen referencias al mito de la caverna de Platón o al mismo Bowie, e incluso al pop de Michael Jackson con una línea de bajo tomada de Billie Jean en We Exist. Sprawl II (Mountains Beyond Mountains), incluída en The Suburbs, abría la faceta más bailable de Arcade Fire. En Reflektor, esta faceta se convierte en protagonista.
