Habiendo ya ganado la Palma de Oro en 1991 con Barton Fink, los hermanos Coen vuelven este año al Festival para presentar Inside Lleewyn Davis, una cinta que pretende ser un recuerdo nostálgico de la escena musical del barrio neoyorkino Greenwich Village a mitad de siglo XX. Protagonizada por el actor y cantante guatemalteco Oscar Isaac Hernández y el estadounidense Justin Timberlake, y con un gato como tercera figura destacable en el reparto, la película ha ofrecido las primeras risas en Cannes, algo que la crítica ha valorado positivamente, definiéndola algunos medios como The Guardian como una de las mejores cintas proyectadas hasta el momento en el Festival.
Dejando a un lado la temática violenta y cruda de la mayoría de films estrenados en las jornadas anteriores, Inside Lleewyn Davis tenía el objetivo de describir la escena de la música folk en Nueva York en los años 60, en concreto, la historia de un personaje que anda entre el límite de aquellos que consiguen el éxito sin talento y los que por otro lado jamás tendrán la suerte aun mereciéndolo. "Hay muchas personas talentosas a las que nadie escucha. La suerte puede propulsar la carrera de cualquiera. Lo más importante es no dejarse acorralar por aquello que nos impide expresarnos" comentaba Timberlake en la rueda de prensa.
Sorpresas en Cannes con Borgman
'Borgman' habla sobre el comportamiento anormal de personas normales
Por otro lado, la otra gran cita de la jornada era la proyeccion de Borgmann, que compite oficialmente junto a la de los Coen. Dirigida por el cineasta holandés Alex van Warmerdam, ha recibido una buena recepción inicial aunque la prensa y crítica avisan de que la película contiene varias escenas fuertes. Críticos como Guy Lodge de Variety la han calificado como un thriller doméstico astuto, traicionero y a ratos hilarante. Muchos han sido los que encuentran referencias en la cinta al cine de Buñuel, Lynch o a Funny games del lado más tétrico de Haneke.
"Borgman puede entenderse como una crítica de nuestra sociedad occidental, pero esa no era mi intención inicial. He querido mostrar el daño provocado por el comportamiento anormal de personas normales, de aquellas con las que uno puede cruzarse por la calle. Hay personas que se vuelven más desenfadadas con la edad. Yo me estoy volviendo malvado. ¡No sé si mi película no ha acabado siendo demasiado malvada!" comentaba el director Warmerdam sobre la película que, ya en su sipnosis oficial ofrece algunos tintes negros sobre su argumento: "Camiel Borgman surge en las calles tranquilas de una periferia acomodada para golpear en casa de una familia burguesa. ¿Quién es él? Un sueño, un demonio, una alegoría o ¿la encarnación real nuestros miedos?"
'Un certain regard' de tinte documental y crudo
Rithy Panh y Adolfo Alix Jr ofrecen sendas obras cargadas de crítica y violencia
Con L’Image manquante de Rithy Panh volvemos a la violencia y al dolor que está impregnando la mayoría de cintas de este año en Cannes. El director camboyano nos habla sobre el genocidio de los jemeres, que diseminó su familia y trastornó su infancia, evocando por primera vez esta tragedia en primera persona. L’Image manquante está inspirada en el libro La eliminación, un relato también en primera persona, que escribió con Christophe Bataille, y publicó en 2012. Realizada siguiendo una línea más cercana al documental está rodada con personajes modelados en arcilla, algo que según la crítica ha aportado una aire de frescura y realismo a la historia que no habría conseguido calar tan hondamente en el público si hubiera sido con una producción de mayor escala.
La segunda proyección dentro de la selección 'Un certain regard' vino dada por un joven director filipino, Adolfo Alix Jr, que cuenta la historia de su país con Death March, un drama que recuerda una tragedia olvidada de la Segunda Guerra Mundial casi a modo documental de nuevo, ya que está rodada en un estudio con el decorado pintado. El director relata de forma visceral las historias de unos personajes atrapados en esta masacre y consiguiendo remover las conciencias de su público pero no como él parecía pretender en un principio, ya que las primeras críticas no han podido ser más negativas. Quizás estemos ante la cinta peor valorada de lo que llevamos de festival.
