"Javi ha salido de su último casting derrotado y lo último que quiere es ir a otra prueba. Pero a ésta tiene que ir. Le obliga su novia, el alquiler y, sobre todo, que no tiene otra opción. Lo que no sabe es que allí conocerá a Esther, una actriz con quien pasará algunas horas hasta que les toque el turno, en un viaje emocional de flirteos, emociones y desengaños que le ayudará a encontrarse con él mismo... Aunque no quiera... Aunque eso pueda cambiarle toda su vida". Ésta es la premisa con la que parte Casting, la segunda película que se ha presentado hoy en la sección oficial a concurso del Festival de Málaga. Ópera prima del realizador sevillano Jorge Naranjo, curtido en cortometrajes, televisión y vídeos musicales, la historia está protagonizada por un reparto muy coral cuya anécdota radica en que los personajes toman prestado el nombre de sus actores.
Casting es la producción más modesta que concursa este año en la sección oficial del Festival de Málaga. Más de dos años de intenso trabajo que por fin ha visto la luz gracias, en buena parte, a la aportación de última hora del productor alemán Torsten Gauger, quien ayudó económicamente en la fase de postproducción de la cinta. Tal vez porque saben lo que es sufrir día a día con un proyecto que crece a sobresaltos, todo el equipo llega a Málaga cargado de ilusiones. Su objetivo: hacer disfrutar también al público. “Hemos hecho esta película para que el espectador lo pase bien como nosotros también lo pasamos bien haciéndola", afirmó Naranjo esta mañana en la rueda de prensa. Para conocer un poco más todo lo que rodea a esta producción, que todavía no cuenta con distribuidora para su comercialización, hemos charlado con su director Jorge Naranjo.
Pregunta: ¿Cómo se hace una película con 6.000 euros de presupuesto inicial y una canon 5D como equipo?
Respuesta: Se hace siendo un incosciente, sin tener ni idea de lo que viene despues porque es la única manera. Porque si lo hubiésemos sabido a lo mejor me hubiese asustado mucho y ya cuando me asuste ya era demasiado tarde; ya me había tirado por la puerta y no podía volver. Había que terminar el proyecto costase lo que costase.
P: Cuando muchos realizadores experimentados en el mundo del largometraje prueban suerte en el cortometraje por lo difícil que resulta sacar adelante un proyecto de este tipo a día de hoy, usted va y hace todo lo contrario.
R: Sí, porque ya había hecho muchos cortos. Tenía ganas de hacer un largometraje. Había hecho más de 15 cortos, y espero seguir haciendo cortos toda mi vida porque me encanta, pero quería saborear la experiencia de hacer un largometraje. Y por eso lo he hecho.
P: Casting es una historia con muchos ingredientes: amor, desamor, frustración, miedo al fracaso. Pero todo ello gira en torno a las pruebas de selección de actores. ¿Cree que los espectadores alejados de todo el engranaje artístico podrán identificarse con los personajes?
R: Creo que sí porque al final el casting no es un tema que le pasa a un actor. En definitiva, un casting es una entrevista de trabajo y todos pasamos por situaciones por las que tenemos que aprender algo de nosotros mismos, que nos lo ponen enfrente y tenemos que decidir aceptarlo o no aceptarlo.
El propio guion se ha ido concibiendo sobre la marcha a medida que íbamos conociendo a los actores
P: La película tiene un reparto muy coral. ¿Fue difícil entrecruzar sus pasos a través de la cámara?
R: La verdad es que fue bastante sencillo, de hecho creo que facilitó las cosas. A mí me ayudó a la hora de elaborar el guión porque me fue muy fácil ir contando pequeñas historias dentro de un envoltorio que es una. Y para la producción de la historia, por cómo era y por el dinero que teníamos creo que también lo ha facilitado mucho porque no teníamos quince días con Javi. No tengo mis cálculos pero no creo que muchos hayan trabajado más de cuatro días. Y esto ha facilitado muchos las cosas porque no teníamos infraestructuras para hacerlo de otra manera.
P: Natalia Mateo, Raúl Arévalo o Daniel Sánchez Arévalo son algunos de los cameos con los que cuenta Casting. ¿Cómo surgió la colaboración con ellos?
R: Yo a Natalia la conozco mucho, somos muy amigos. Fue un día que fui a correr por Lavapiés y me la encontré a ella tomando unas coñas con unos alumnos suyos y le dije Natalia tengo esto, creo que lo suyo es que lo hagas tú y me dijo que sí. Luego, el tema de Dani y Raúl es que son muy amigos de Natalia, entonces fue ella la visagra para llegar a ellos. Y yo la suerte que tenían libre, de que podían, que querían. En realidad, me han hecho un favor enorme. La verdad es que les estoy muy agradecido por ello.
P: Todos los personales del largometraje reciben el nombre real del actor que los encarna, lo que da la sensación que estamos ante un falso documental. ¿Ese era su objetivo?
R: No era tanto la idea del falso documental como la idea de que ellos hacían de ellos. Es una idea que viene de los cortometrajes y a mí me pareció muy interesante. Lo cierto es que hemos trabajado de una forma rara, no es nada al uso. Desde el propio guion que se ha ido concibiendo sobre la marcha a medida que íbamos conociendo a los actores. Bueno y que sean ellos, le da un punto más de verdad. Hemos intentado darle a la película la mayor desnudez posible pero con el juego de la diversión, sin hacer nada profundo. Es una película para que la gente se divierta, lo pase bien y nosotros disfrutemos haciéndola.
P: ¿Por qué decidió escoger para su puesta de largo la trama desarrollada en la trilogía de cortos Casting y no probar suerte con otra historia completamente diferente?
R: Son cosas que casi uno no decide, surge. Había escrito algún guión de largometraje, pero me di cuenta de que Casting era la idea que podía funcionar muy bien porque le daba algo a la peli que yo siempre había buscado: algo único para mí como creador que me permitiera el reto de grabar una peli. Hay relaciones, amor, pero a partir de un momento dado de la película te encuentras con que ves el casting de ellos. Pensé: esto no lo he visto y como no lo he visto, lo quiero enseñar. Ya había experimentado en los cortos que podía funcionar y espero que funcione con la película.
P: ¿Hasta qué punto las preferencias de un director puede influir en el casting final de una película?
R: Pues en mi caso completamente. El casting de la película está elegido desde el principio hasta el final por mí. Lo que pasa es que no sé yo hasta qué punto lo elijo yo o lo elige la película. [Risas]. Espero haber acertado.