Tras el comienzo de un nuevo año florecen los propósitos de conocer mundo y viajar a aquellos lugares que siempre nos llamaron la atención, bien por su misterio o exotismo o por las historias que llegaban a nuestros oídos. Pero, ¿cuáles son los mejores destinos para perderse en los próximos doce meses?
1) Kosice: Esta ciudad eslovaca, la segunda en población tras Bratislava, es la Capital Europea de la Cultura 2013, por lo que una ingente cantidad de exposiciones, festivales y conciertos pasarán por las, ya de por sí, bohemias calles de la ciudad. Su centro histórico es uno de los mejores conservados del continente, con un total de 501 objetos protegidos, y con edificios entre los los cuales destacan la catedral gótica de Santa Isabel el edificio del Ayuntamiento y el Teatro estatal. Los viajeros que se adentren en su historia viva arquitectónica podrán disfrutar también de eventos como La Rambla (septiembre), donde los estudiantes del instituto bilingüe convierten la calle principal en la Rambla barcelonesa durante un par de horas, la Noche Blanca (5 de octubre), cuando el Parque Municipal es alumbrado por más de 5.000 bombillas mientras actuaciones de arias operísticas rompe el silencio nocturno o las fiestas populares de la ciudad, en mayo, con un amplio abanico de actividades para todos los gustos.
2) Pekín: En esta milenaria ciudad se respira misterio y exotismo por cada uno de sus rincones. Es un destino obligado para todo aquel que se considere viajero. Su encanto reside en su propia historia. Capital de una de las mayores civilizaciones de la humanidad, Pekín alberga en su interior maravillas que estuvieron vetadas a los ojos de los mortales durante siglos. Una de ellas es la llamada "Ciudad prohibida", hogar durante más de 500 años de los emperadores chinos, y de la que nadie podía entrar ni salir sin el permiso del emperador. Pero esta ciudad también alberga otros tesoros, como la Plaza de Tian'anmen, las tumbas Ming, el Museo del Hombre (Patrimonio Mundial de la Humanidad) o la legendaria Muralla china. Una fecha perfecta para comprender la magia de esta milenaria ciudad es el mes de febrero, cuando tiene lugar el Año Nuevo chino, una fiesta por todo lo alto que pone patas arriba a todo el país. Otros puntos para poder vivir el encanto de esta señalada fecha son el Barrio Chino de Londres o Chinatown de Nueva York, así como cualquier otra población que albergue una gran cantidad de chinos entre sus habitantes.
3) Dublín: La capital irlandesa es un destino clave en el mes de marzo, ya que sus calles se paralizan y el color verde inunda su atmósfera por completo. Se trata del más que famoso Saint Patrick's Day, la mayor festividad de la isla, que incluso atraviesa fronteras. Pero aparte de esta celebración, Dublín nos embrujará con sus pubs, donde podremos degustar una buena pinta de cerveza con la banda sonora de conciertos en directo de música folk, la naturaleza de sus parques, como el Phoenix Park, el mayor parque urbano de Europa, o la "literaturalidad" de sus calles. Dublín fue cuna de grandes novelistas, entre los los cuales destacan Oscar Wilde, Bram Stoker o James Joyce. Este último es uno de los artistas más queridos de la ciudad, que celebra el llamado Bloomsday, o el que es lo mismo, un evento anual en honor de Leopold Bloom, personaje principal de la novela Ulises. Celebrado cada 16 de junio desde 1954, sus participantes procuran comer y cenar lo mismo que los protagonistas de la obra, además de realizarse rutas para seguir los puntos exactos por los que transcurre la acción de la novela.
4) Montenegro: El principal encanto de este reciente país europeo, independiente desde el 2006, reside en su litoral casi virgen. Un punto clave son las Bocas de Kotor, el único fiordo mediterráneo, con 30 kilómeros de anchura a la vera del legendario monte Lovcen, símbolo de la identidad nacional montenegrina y donde se encuentra el Mausoleo de Petar II Petrovic Njegos, uno de sus mayores poetas y filósofos. Al final de esta proeza de la naturaleza encontramos la ciudad de Kotor. Una gran parte de esta pobación fue destruida por un terremoto en 1979, pero aún quedan algunos edificios relevantes como la catedral de Saint-Triphon, que contiene las reliquias del santo. Otros lugaresinteresantes para la aventura en Montenegro son la ciudad-isla de Sveti Stefan, de estilo medieval y llena de artistas, el Parque Nacional del lago de Skadar, la mayor reserva de pájaros de Europa o su capital, Pogdorica. Antiguamente llamada Titogrado, en ella confluyen los ríos Zeta y Moraca. Los visitantes podrán admirar las ruinas del castillo de Nemanjic y, por el casco antiguo de la ciudad, la iglesia de San Jorge, del siglo X, la torre del reloj (Sahat-kula) y, mientras pasean, podrán escuchar el gusle, el principal instrumento montenegrino, una especie de violín de una sola cuerda. Si duda, Montenegro es uno de los mejores lugares para conocer a fondo el Mar Adriático. Un dato relevante para el turista es que, al contrario que Croacia o Serbia, en Montenegro se adoptó el euro como moneda oficial.
5) Ámsterdam: La capital de los Países Bajos es uno de los destinos preferidos por una gran parte de la juventud europea. Su amplia oferta cultural y lúdica y su visión única del mundo son sus principales estandartes. Los visitantes que se pierdan por las calles de Ámsterdam podrán disfrutar de mil y una rutas y rincones inolvidables. Uno de ellos es el Barrio Rojo, donde las prostitutas muestran sus cuerpos a través de un escaparate sin que nadie se lleve las manos la cabeza. Espectáculos cabaretescos, tiendas eróticas o incluso locales de sadomasoquismo nos muestran la parte más tabú de la ciudad, de la que se sientes orgullosos sus habitantes. Otros lugares a visitar en Ámsterdam son las calles del centro, por las que se puede alquilar una bicicleta para recorerlas mejor y admirar sus canales. Cada canal tiene su historia y abundan los puestos de venta de flores (los famosos tulipanes holandeses), los coffe shops (otro de los lugares estrella) y la historia viva de Europa, como la casa de Ana Frank en el antiguo barrio judío, el mayor templo budista del continente o varios de los más importantes museos. Sin duda, un destino obligatorio para cualquier viajero y que en este año vivirá días inolvidables ya que se cumplen 400 años de la creación de sus canales, su artista más famoso, Vicent Van Gogh, hace 160 años que nació y su zoo celebra el suyo 175 aniversario.
6) Ecuador: Este país sudamericano va a ser uno de los destinos estrella del año. ¿Qué podemos encontranos allí? Para comenzar, una naturaleza increíble y olvidada, donde descubriremos las Islas Galápagos (donde Darwin ideó su Teoría de la Evolución), los enclaves más apartados de la selva amazónica o la ciudad de Baños de Agua Santa, en la que en sus alrededores podremos deleitarnos de un sinfín de cascadas (como el Palión de él Diablo) y con el verde de los parques nacionales de Llanganates y Sangay. Otras ofertas turísticas que ofrece Ecuador son el viaje en tren desde Quito a Latacunga en un ferrocaril de 1908, que nos mostrará un rostro diferente de los Andes ecuatorianos y una vista única del volcán Cotopaxi. Si el viajero quiere perderse en ambientes más urbanos podrá hacerlo en la capital, Quito, una ciudad cosmopolita en la que podremos pisar la línea del Ecuador y estar con un pie en el hemisferio norte y con otro en el sur mientras deleitamos la vista con sus edificios coloniales.
7) Oslo: La capital noruega va a celebrar por todo lo alto el 150 aniversario del nacimiento de su pintor más famoso, Edvard Munch, el creador de El Grito, una de las obras más caras e imitidas del mundo del Arte. En la tierra de los antiguos vikingos, en la ciudad de Oslo podremos visitar sus museos (como el del Folklore Noruego o la fortaleza de Akershus), deleitarnos con la arquitectura futurista de su Palacio de la Ópera o la zona del Tjuvholmen, o edificios emblemáticos como el Ayuntamiento o el Palacio Real. Si el visitante quiere una experiencia de la mano de la naturaleza, podrá embarcarse en uno de los barco del Chaterbatrederiet para admirar el fiordo de Oslo y la infinidad de islas con su historia propia.
8) Mustang: Este legendario reino es un enclave perfecto para descubrir el Himalaya. Fundado en el 1380, aunque hoy no disfruta de la independencia de épocas anteriores (pertenece al Nepal), este territorio aún sigue teniendo un rey, que tiene que ser tibetano y vasallo al mismo tiempo del Tíbet y del Nepal. Su capital es Lo Manthang, donde apreciaremos una vista única de sus valles y montañas, además de sus impresionantes monasterios, que recogen frescos pictóricos de varios siglos de antigüedad. Otros lugares a visitar son la ciudad de Jomson, la más turística ya que allí está el aeropuerto, las aldeas de Tukche y Marpha, por las que transcurre la ruta del Trans-Himalaya, el centro espiritual hinduista del Muknitah o la cueva-templo de Luri.
9) Samarcanda: Una de las ciudades míticas de la historia de la Humanidad, escenario de miles de historias y leyendas de los mercaderes que atravesaban la Ruta de la Seda. Esta ciudad uzbeca fue declarada en el 2001 como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y recoge más de 2.700 años de historia entre sus calles. Su momumento más destacado es la Plaza Registán, donde encontramos la madraza Sher-Dor, con sus inconfundibles azulejos y desde donde se divisan las cúpulas azules del complejo religioso del Shah-i-Zindeh. En esta ciudad también podremos visitar el mauselo del Gur Emir, en el que descansan para la eternidad los restos de Timur, uno de los grandes héroes patrios del Uzbekistán, que en el siglo XIV construyó un gran imperio con capital en Samarcanda.
10) Nueva Zelanda: Hace unos años sus paisajes naturales eternizados en la trilogía del Señor de los Anillos cautivaron nuestras miradas. Ahora, el Hobbit hizo regresar esos recuerdos a nuestra memoria. Estas islas del Pacífico sur serán la maravilla de todos aquellos miles de fans que quieran pisar los mismos lugares que salen en sus películas favoritas. Uno de ellos, Mordor, es en realidad parte del Parque Nacional del Tongariro, lleno de volcanes y montañas cubiertas de nieve. Los que quieran visitar la Comarca de los hobbits tendrán que visitar la pequeña aldea de Matamata, donde encontrarán construcciones similares a las casas de los famosos personajes y atracciones turísticas relacionadas con las películas. Pero estos no son los únicos lugares a disfrutar de Nueva Zelanda. Si atravesamos el Parque Regional de Kaitoke (lugar donde se grabaron las escenas de Rivendel), a unos 50 minutos de Wellington, podremos deleitarnos de antiguas rutas maioríes por medio de un eterno bosque verde. También podemos disfrutar de este singular país sin relacionarlo con el Señor de los Anillos visitando la ciudad de Auckland, la más cosmopolita del país y de la que podremos quedar alucionados por el SkyTower, la ciudad universitaria con marcado carácter escocés de Dunedin o empaparnos con la cultura maiorí, presente hasta en los partidos de rugby.
11) Botswana: Este país africano fue puesto en el mapa el año pasado tras el escándalo protagonizado por el rey don Juan Carlos de Borbón tras cazar elefantes en un safari. Fuera de toda polémica, este territorio ofrece un sinfín de especies animales y vegetales únicas en el mundo. Descansar bajo la sombra de un baobab, atravesar el desierto del Kalahari, admirar la forma de vida de la tribu de los bosquimanos o contemplar la fauna ejemplar a través de los diversos safaris del delta del Okavango son sólo unas cuantas cosas a realizar en este destino. El único problema para el viajero es el dinero. La economía de Botswana está basada en las minas de diamantes y en el turismo de alto nivel adquisitivo. No habrá ningún tipo de problema de seguridad pero sí de encontrar algún alojamiento barato, ya que el gobierno del país fomenta únicamente paquetes turísticos de alta gama. Una opción, tampoco hecha para muchos bolsillos, es utilizar nuestro vehículo como hotel.
12) Barranquilla: Esta ciudad colombiana fue denominada Capital Americana de la Cultura para el 2013. Cuarta ciudad del país, acoge una de las mayores fiestas de la zona norte sudamericana, como es el Carnaval de Barranquilla, uno de los mayores del mundo junto con el de Venecia y del Río de Janeiro, y que fue denominado Patrimonio Cultural de la Nación por el Congreso de Colombia en el 2001 y Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad por la Unesco en el 2003. Aparte de esto, la ciudad alberga un sinfín de museos y lugares inolvidables como el parador El Sombrero Vueltiao, uno de los símbolos de la filosofía de vida colombiana o el Parque del Sol, centro recreativo que ofrece un amplio abanico de actividades socioculturales. Pero Barranquilla es famosa por ser la cuna de la cumbia, uno de los bailes más sensuales del mundo, que podremos bailar en los bares y discotecas de su casco histórico de arquitectura colonial, en el que sobresalen la Plaza de San Nicolásy el Paseo de Bolívar, la mayor avenida de la ciudad.
13) Montreal: La ciudad más poblada del Quebec es un destino ideal para los viajeros que quieren descubrir una nueva cultura de una forma tranquila y relajada. Una de las ciudades con la población más educada y feliz es, además, la capital cultural del Canadá (aquí nació el famoso Cirque du Soleil), con 70 festividades internacionales al año, donde destacan el Festival de Jazz o los múltiples conciertos en sus bares y pubs. Durante el invierno, a causa de las frías temperaturas, la ciudad ralentiza su ritmo de vida hasta la primavera, aunque la mejor ocasión para visitarla es durante los meses de verano y comienzos de otoño. Fuera de esta oferta cultural, los visitantes podrán visitar el mercado de Jean Talon, en el barrio de Little Italy, pasear por el parque de Mont Royal, donde se podrá admirar la panorámica de la ciudad y luego visitar el oratorio de St. Joseph. Otros lugares para perderse son la Rue des artistes, el edificio del Ayuntamiento, la Biosfera, en el entorno natural de la isla de Santa Helena, la catedral de Notre Dame de Montréal, el Puerto Viejo o los kilómetros que forman las galerías subterráneas de la ciudad, donde surgen innumerables tiendas y restaurantes que comunican todas las partes de la ciudad. En los meses de invierno suenen estar reventeando de gente, ya que pasear por la superficie no es muy aconsejable.
