Andreu Reviriego Martorell, Mallorca, 6 de octubre de 1999, es estudiante del Máster en Análisis de Datos Masivos en la Universidad de las Islas Baleares, desde que se graduó en Matemáticas en la misma universidad. Es jugador en el equipo Epsiloneta, llamado así por la letra tan usada en matemáticas épsilon, y desde el comienzo de la Liga, ha jugado en casi todos los partidos. A su juicio, la Liga Matemática mejorará cuando las Universidades colaboren directamente con los equipos.
¿Qué impresiones tienes de la Liga Matemática?
La Liga Matemática es una muy buena iniciativa, sobre todo para aquellos que les gustan los juegos mentales, los retos matemáticos y desafíos. Pero creo que hace falta que las Universidades se impliquen más con los alumnos y equipos que participan en la Liga.
¿Y del equipo?
El equipo es competitivo pero falta gente. Es el mayor problema que tenemos. Al ser el delegado Frank William Hammond una persona que no puede participar, y que en el equipo somos graduados o estudiantes de cursos finales, ha sido muy complicado compaginar los partidos. Es un buen proyecto a largo plazo si se puede oficializar y las universidades colaboran en su ejecución.
¿La Universidad de las Islas Baleares tiene trayectoria en la resolución de problemas de matemáticas?
En algunas de las asignaturas básicas de la carrera, en el primer curso, se ha dado gran parte de la teoría que estamos aplicando luego para la resolución de los problemas, aunque siempre los más complicados suelen ser de conceptos más avanzados.
Además, la Universidad es colaboradora de actividades a nivel autonómico como las Olimpiadas Matemáticas de bachillerato, las Pruebas Canguro Matemático, entre otras que fomentan el espíritu competitivo en matemáticas.
Como jugador, ¿que rama es la que más te interesa?
En mi caso, la rama de lógica y cálculo mental es la que siempre me ha llamado más la atención. Son unas asignaturas que me llaman mucho la atención, y por ende las que mejor llevo en los partidos de la Liga Matemática.