No es fácil mantenerse 20 años en la música pero María Carrasco lo ha hecho. Desde niña gracias al programa “Menuda noche” donde se puso encima del escenario hasta su último disco, “Inmune al dolor”, ha abrazado a lo largo de su carrera diferentes estilos con total naturalidad hasta acercarse al pop.
En plena promoción de su último single, “Agüita del río”, abre las puertas de su corazón a Vavel para hablar con la naturalidad y el buen rollo que la caracteriza, de sueños, esfuerzos, auto renovación y reivindicación.
Entrevista
Pregunta: Con Agüita del rio, ¿vamos a encontrar con lo que refrescarnos del calor este verano?
Respuesta: Es un tema fresquito, justo lo que estábamos buscando con esta canción, así que creo que hemos dado con la tecla.
P: ¿De qué nos habla?
R: Yo respiro Cádiz y Andalucía por los cuatros costados, esta canción es un reflejo de la buena vibra y buena gente que hay allí. También nos cuenta de salirse de la rutina; muchas veces nos metemos en esa dinámica y no disfrutamos de las pequeñas cosas de la vida, que al final son las que conforman todo. Tenemos que ir buscando siempre esa buena vibra para darle un sentido y esas personas que son el agua fresquita, las que nos aportan la frescura que debe tener a diario la vida.
P: La canción también hace referencia a los sueños cumplidos, ¿cuáles han sido los tuyos?
R: Estoy en un momento tan dulce que considero que casi todo lo que tengo es un sueño. Vivo un momento maravilloso porque llevo muchísimos años en la música, me estoy renovando y me está gustando como empezar de nuevo con este género pop, que he compuesto con tanto cariño. El sueño cumplido está siendo todas las vivencias que me está brindando la música.
P: Ahora que estás en un estilo más pop como comentas, ¿es lo que te pide el cuerpo hacer?
R: Hay que perseguir sacar un poco lo que tenemos dentro. El arte se mueve siempre por sentimientos y en este caso yo me dedico simplemente a sacar la buena vibra que tengo dentro gracias a lo que lo que estoy viviendo, entonces está siendo muy fácil.
P: Con el single has tomado distancia musicalmente respecto de tu último disco, “Inmune al dolor”.
R: “Inmune al dolor” ha sido una terapia de reconstrucción tremenda para mí porque viene de una pérdida, de haber superado muchas cosas y encontrarme bastante mejor. Este ha sido como el camino hacia la luz, ir en dirección al túnel de la luz blanca y es una maravilla, porque además desde que salió anoche, se está acogiendo increíblemente.
P: Ha entrado rápido en lo más alto de plataformas como iTunes.
R: Es un regalazo. La vida me está premiando por todo el cariño con el que estoy haciendo esto. Hay mucho trabajo con un equipo detrás también haciendo que funcione, llevando el hilo a la perfección y caminando conmigo.
P: ¿Tienes miedo o a que te critiquen porque cambies el estilo?
R: No tengo miedo. Cuando te empiezas a meter en el mundo del arte y la música sabes que estás expuesto tanto a críticas constructivas, como a las no tan constructivas, personas que te van a adorar y otros que son un hater. Estoy preparada para todo y no me da miedo. Lo que me daría miedo es no hacer lo que quiero, esa prohibición no me la voy a poner yo.
P: ¿Y cómo asumes esas críticas?
R: Muy bien. Las constructivas genial, porque siempre tenemos algo que mejorar y si no tenemos nada que mejorar, es que ya hemos tocado techo. Los que me escuchan de siempre me están poniendo un límite en el cielo, pero no pasa nada, vamos sin miedo. Me siento ilimitada ahora mismo gracias al empujón que me da mi gente, es la ley del espejo: transmitimos vibraciones que a su vez nos están devolviendo y esto hace que fluyamos del carajo.
P: Llevas 20 años en la música, ¿crees que es importante ya no solo para ti sino para cualquier artista después de muchos años probar nuevos estilos, hacer cosas diferentes?
R: Tienes que soltarte, no faltándote el respeto a ti, a tus principios y valores. Musicalmente tienes que estar abierto al cambio y a salir de la zona de confort. Animo a aquellos compañeros a que, en el momento en el que su alma le inste a buscar otras cosas, que lo hagan, no tiene que darte miedo porque los que te escuchan de siempre van a entenderte y van a saber que sigues estando ahí, pero renovado totalmente.
P: ¿Qué momento destacas de tu carrera?
R: Todos los momentos son relevantes. Cada disco es diferente, y yo lo comparo a tener un hijo, a todos los quieres por igual, no quieres quitarle el mérito a ninguno.
P: ¿Y algún momento que haya sido olvidar o que no te haya gustado tanto?
R: Ninguno, todo ha sido necesario absolutamente necesario y me ha me ha dado un aprendizaje que no cambiaría por nada del mundo.
P: ¿Te queda algún sueño por cumplir?
R: Sí, estoy en el camino de cumplir todo y para eso sigo trabajando, pero yo lo que quiero es llevar a mi padre un Grammy, que es el melómano que me metió en el mundo de la música, para que lo tenga debajo de la tele. Eso sería ponerle la guinda a la al pastel.
P: ¿Qué planes tienes para el futuro próximo?
R: Antes que acabe el año, quiero sacar dos singles más, que ya están compuestos y estamos trabajando en ellos, a la vez que estamos de promoción con “Agüita del río”. El próximo disco verá la luz tan pronto como esté compuesto, cribado y con la suficiente calidad como la gente está acostumbrada a consumir de mí.
P: Tienes total libertad de la discográfica sin presiones.
R. La discográfica me apoya al cien por cien, lo que estoy haciendo no está impuesto por nadie, solo impuesto por lo que me va dictando el corazón y es el camino para que siga ahí la gente que me apoya. Más no le puedo pedir ahora mismo al mundo de la música.
P: En lo relativo a conciertos, ¿qué vas a hacer ahora en verano?
R: Seguimos con la gira de “Inmune al dolor”. El 7 de julio estaremos en el Sotogrande Music Festival, que me hace muchísima ilusión actuar allí porque comparto cartel con artistas muy buenos y compañeros maravillosos, como Pastora Soler o Manuel Carrasco. El 15 de julio voy a Fuengirola, y de aquí al final de verano tendremos unos 15-20 conciertos. En invierno seguiremos con el motor a tope.
P: Estamos en la semana del Orgullo, tú qué has cogido muchas veces esa bandera y no te importa reivindicar, ¿qué te parece que se esté ocultando banderas o que no se quieran sacar a los balcones?
R: La política no se tiene que meter nunca con la libertad de las personas, tenemos una serie de derechos humanos, que recoge además la Constitución española. No hay que pensar en la política, sino en las personas, en sus sentimientos y en ser empático. Si se sigue una serie de mandamientos políticos, también deberían seguir los de la religión que se profesa en España, que es amar y respetar al prójimo, como a ti mismo. Yo tengo una pareja, una mujer, estoy orgullosísima de lo que soy y no quiero que nadie que pertenezca al colectivo se sienta oprimido en algún momento. Si ellos quitan la bandera, yo me la pongo.
P: ¿Crees que en España vamos por el buen camino hacia una sociedad igualitaria?
R: La población sí, gracias a que la juventud se está dando muchísimo a la educación, que va de la mano con la cultura. Cuando uno tiene conocimiento y cultura, es bastante más tolerante que el que no lo tiene o no quiere pegar la nariz a un libro. Estamos yendo por el buen camino pero todavía nos queda mucho por andar, hasta que no veamos noticias en las que las personas que no tengan la orientación sexual estándar, la hetero normativa, no corran peligro de que se los agreda. Es importante reivindicar nuestros derechos por todo el colectivo y ahí estaré luchando por ellos.